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Explosión en Rivadavia: los peritos buscan determinar qué pasó
Un día después de la explosión en el negocio de garrafas en Rivadavia, los peritos buscan determinar qué pasó y la familia comenzó a levantar los escombros.
POR REDACCIÓN
El olor a gas se percibe desde lejos, al llegar a la calle Benavidez, a metros de Almirante Brown (calle Bonduel) se puede ver cómo quedó el negocio de venta de garrafas y la casa del propietario que fue afectada por la fuerte explosión que destrozó todo a su paso. Durante la mañana del martes 2 de enero, los peritos estuvieron en el lugar para determinar que pasó.
En contacto con DIARIO HUARPE, Matías Martínez, hijo del dueño del local que explotó, contó que él mismo fue el encargado de recibir a los bomberos que comenzaron a hacer los peritajes para determinar qué fue lo que causó la explosión de una veintena de garrafas que estaban en el depósito de esta familia.
Los especialistas no descartan nada, se pensó en que podría ser un elemento de pirotecnia que explotó y causó la detonación de las garrafas. También se evaluó la posibilidad de que haya sido una falla eléctrica que causó una chispa que inició la explosión en cadena de las garrafas que estaban en depósito.
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Martínez explicó que el depósito tenía varias garrafas, porque con los constantes cambios de precios, los proveedores les pidieron que esperaran unos días para volver a stockearse con los nuevos valores de venta de las garrafas en todas sus presentaciones.
Mientras las autoridades los especialistas hacían las pericias, la familia Martínez comenzó a tomar conciencia de las perdidas económicas que sufrieron. Es que se quemaron muebles electrodomésticos, la ropa, documentos y hasta los remedios para la diabetes del padre de Matías.
La primera tarea será limpiar la casa, sacar los escombros y los restos de cosas quemadas. Luego esta familia deberá pensar como volver a empezar tras perder el negocio en el que trabajaron por más de 20 años.
Cómo fue
El gran incendio que terminó con el negocio de los Martínez comenzó antes de las 18 de este lunes 1 de enero. El comercio, en el que también vendían alimentos, se encontraba cerrado y no había nadie en casa. Fue un vecino quien vio salir el humo y llamó a los bomberos.
En cuestión de minutos las llamas se extendieron en todo el negocio y algunas garrafas comenzaron a explotar. Los bomberos evacuaron la zona, enfriaron los envases con gas para evitar nuevas explosiones y apagaron el incendio tras un arduo trabajo y siempre con el temor constante de que se produjeran nuevas explosiones.