La CGT anunció movilización para el 9 de abril y paro general el 10 de abril

Luego de una reunión en la sede histórica de Azopardo 802, el consejo directivo de la Confederación General del Trabajo (CGT) decidió realizar un paro general de 24 horas el jueves 10 de abril. Para acompañar el paro, se llevará a cabo una movilización el día previo. El miércoles 9 habrá una concentración en el centro porteño que coincidirá con la habitual marcha de los jubilados, que en las últimas semanas ha crecido en concurrencia en las inmediaciones del Congreso de la Nación.

Héctor Daer, integrante del triunvirato de la central obrera, aseguró tras la reunión que “las acciones sindicales durarán 36 horas”, ya que la concentración comenzará a las 12 del mediodía del 9 de abril.

Además de la protesta vinculada al paro, los gremios definieron movilizarse el lunes 24 de marzo en conmemoración del Día de la Memoria, jornada en la que se recuerda a las víctimas de la última dictadura militar. Será una semana con dos manifestaciones sindicales de alto impacto.

La medida de fuerza será la tercera en lo que va del año impulsada por la CGT. Inicialmente, no contó con el respaldo de todos los sectores debido a la falta de consenso, pero finalmente se logró un acuerdo en la reunión de este jueves. A la iniciativa de los sectores conocidos como “Gordos” e “Independientes”, se sumaron el gastronómico Luis Barrionuevo, el ala kirchnerista representada por Smata y La Bancaria, las dos CTA y todos los gremios del transporte.

Entre los gremios que garantizarán el alcance del paro se encuentran los de transporte. Omar Maturano (La Fraternidad), Sergio Sasia (Unión Ferroviaria) y Roberto Fernández (UTA), representantes de los trabajadores de trenes y colectivos, confirmaron su adhesión, por lo que ese jueves no habrá servicio de transporte en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

La decisión de concretar el paro marca el fin de la tregua que existía entre la CGT y el Gobierno, en el marco de negociaciones para evitar avances en la reforma sindical en el Congreso.

Finalmente, la mayoría de la CGT optó por un paro de 24 horas en lugar de uno de 36 horas, como había propuesto Barrionuevo. Se trató de una posición intermedia, ya que algunos dirigentes, como Gerardo Martínez (UOCRA), buscaban evitar una nueva medida de fuerza.

En el ámbito sindical, la evaluación del Gobierno de Javier Milei es similar a la de la dirigencia política peronista: consideran que enfrenta dificultades crecientes, agudizadas por la polémica en torno a la criptomoneda $LIBRA.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, cuestionó la medida y señaló: “Este es el Gobierno que más rápido sufrió un paro nacional, fue a los poquitos días. Estos paros son para defender intereses propios, no hay nada que amerite un paro cuando del desastre heredado se han corregido temas que fueron un reclamo de la sociedad y los trabajadores, como la inflación".

Además, acusó a la CGT de no haber protestado durante la gestión de Alberto Fernández: “Durmieron tanto tiempo, es increíble como de repente despertaron”, expresó con ironía en su conferencia de prensa.