En la frontera de Argentina - Chile, efectivos de Gendarmería inspeccionaron un camión y secuestraron 300 celulares nuevos, pero sin los papeles necesarios para que puedan ser comercializados.
Los menores aprovecharon que ya estaba de noche en el Parque de Mayo, en Capital, y sorprendieron a un grupo de jóvenes y les arrebataron los teléfonos celulares y una mochila, para luego huir en un remis, donde fueron detenidos.
Los delincuentes quedaron registrados en video de las cámaras de seguridad y tras una investigación, dieron con el domicilio de los acusados: eran una pareja oriunda de Chile.
El ladrón sustrajo primero un celular a una pareja que estaba tomando mates y luego, por una ventana, sacó otro equipo de un negocio. La Policía de San Juan lo atrapó.
El botín valuado en más de $3 millones incluye una moto y 30 celulares. Los ladrones fueron sorprendidos escondiendo lo robado en una alcantarilla de Rodeo, en Iglesia, pero lograron escapar.