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Policiales > Tenía un grupo extremista

Detienen a un joven en Río Negro vinculado con el Estado Islámico

David Nazareno Ávila, de 21 años, fue detenido en General Roca, Río Negro, acusado de vínculos con grupos extremistas islámicos y de solicitar instrucciones para fabricar explosivos.

POR REDACCIÓN

14 de enero de 2025

David Nazareno Ávila, de 21 años, fue arrestado en General Roca, provincia de Río Negro, acusado de mantener vínculos con grupos extremistas islámicos, específicamente con el Estado Islámico. Su captura se concretó tras una investigación de nueve meses que incluyó la participación de un agente digital encubierto y el análisis de conversaciones comprometedoras halladas en su teléfono móvil. La causa está a cargo del Juzgado Federal de Campana, dirigido por Adrián González Charvay.

En los chats obtenidos durante la pesquisa, Ávila se presentaba como "Naza" y solicitaba ayuda para fabricar explosivos, afirmando su intención de perpetrar un ataque en Argentina. “En Argentina tenemos un gobierno sionista que apoya a Israel y debe pagar por sus pecados. Quiero llevar adelante un ataque. Quiero aprender a hacer explosivos si me pueden ayudar”, escribió en un mensaje dirigido a un presunto miembro de una organización terrorista.

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Durante su declaración indagatoria, Ávila reconoció la autenticidad de los mensajes, pero negó las acusaciones en su contra, asegurando que sus intenciones no eran reales. Alegó que su participación en grupos extremistas era parte de un "juego" y que planeaba quedarse con el dinero que los miembros pudieran enviarle para financiar un supuesto atentado. Sin embargo, los investigadores desestimaron esta versión por considerarla inverosímil, dado el tono y el contenido de las conversaciones.

“Es raro que una persona interactúe con estos grupos a modo de juego, lo que hace poco creíble su versión”, afirmó un investigador. Además, indicaron que Ávila habría contactado a estos grupos tras navegar en sitios relacionados con el terrorismo y posteriormente unirse a comunidades en la plataforma Telegram, incluyendo un grupo con el nombre de Vladislav Roslyakov, autor de una masacre en Ucrania en 2018.

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Ávila residía en una vivienda en General Roca junto a sus hermanas y una sobrina. Trabajaba como repartidor en una mensajería contigua a una empresa de agro perteneciente a la comunidad judía. Antes de este empleo, tuvo un breve paso por el Ejército Argentino como voluntario, de donde fue dado de baja tras un mes y 18 días por "no cumplir con las condiciones para el servicio y la disciplina", según fuentes militares.

El acusado habría manifestado a su entorno que su salida del Ejército se debió a un incidente de robo, una versión que también es cuestionada por los investigadores. En cambio, los informes oficiales señalan que su baja se debió a una falta de adaptación al régimen militar.

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Los investigadores consideran que Ávila podría tener dificultades en la socialización y la integración social, factores que lo habrían llevado a buscar reconocimiento en estos grupos extremistas. “Personajes muy marginales encuentran validación en este tipo de comunidades, donde intentan convertirse en referentes”, señalaron fuentes del caso.

La detención de Ávila pone en evidencia la amenaza que representan las redes extremistas en el ámbito digital y la importancia de la cooperación internacional y local para prevenir actos de terrorismo. Mientras tanto, las autoridades continúan analizando el dispositivo secuestrado en busca de más información que permita esclarecer el alcance de sus vínculos y posibles planes.

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