Ensanche de la Central: expropiarán a unos 100 frentistas para el segundo tramo de la obra

El ensanche de la avenida José Ignacio  de la Roza se encuentra en su etapa final respecto al primer gran tramo de la obra y en una semana la empresa la entregará. Pero ahora desde el Gobierno Provincial comenzaron a trabajar de cara la segunda parte de la obra que es el tramo comprendido al oeste. Para este ensanche se prevé que se expropie parte del terreno de unos 100 frentistas.

La primera parte de la obra está llegando a su fin luego de más de dos años de tarea. El ensanche de la Central en el tramo comprendido entre Avenida de Circunvalación e Hipólito Irigoyen será entregada por la empresa el 23 de septiembre poniéndole fin a las tareas que implicaron la primera y gran parte de la obra.

Pero desde el principio se mencionó que la idea era que esto tuviese una segunda parte que comprendiese desde Irigoyen hasta Rastreador Calivar. Ahora, si bien la actualidad económica del país no es la mejor para encarar obras, desde el Gobierno provincial comenzaron a trabajar en los pasos previos que se deben realizar de cara al trabajo de campo. Por eso empezaron a ver los espacios que se necesitarán para encarar las expropiaciones.

“Hemos decidido darle mucho énfasis a los trámites previos a hacer la obra que son los de expropiación de los terrenos que haga falta. Hemos comenzado con eso, estamos haciendo las evaluaciones de afectaciones de dominio”, explicó desde la Dirección Provincial de Vialidad, su titular Juan Manuel Magariños quien agregó: “Tenemos un número de cerca de 100 frentistas que van a estar en la expropiación, pero no sabemos aún la superficie de cada uno de los terrenos porque para eso hay que hacer mensura y ver los títulos de propiedad originales”.

Desde Vialidad están trabajando junto a la Dirección de Catastro para hacer las declaraciones de utilidad pública y las mensuras correspondientes. Con esto deben ir iniciándose las gestiones en las que participa el Tribunal de Tasación de la provincia donde define de qué manera hay que darle valor a las propiedades afectadas.

“El manejo de estos tiempos en la mayoría de los casos están fuera de nuestro alcance, por eso decidimos empezar con eso hasta que se definan las posibilidades de ejecutar la obra”, agregó Magariños.

Por último, el funcionario explicó que “la segunda etapa pretendíamos darle continuidad en la medida que se vaya terminando la primera. Pero las condiciones actuales nos hacen tener precaución y evaluar si es oportuno seguir adelante”.