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Golpiza en Angaco: una oficial de la Policía bajo la mira por ¿mentir?
Según el denunciante, la oficial de la Policía quedó bajo la mira porque supuestamente habría mentido el día que sus compañeros le dieron una golpiza a un hombre en Angaco.
POR REDACCIÓN
En la mañana de este viernes se ha llevado a cabo una ampliación de objeto que involucra a una oficial a cargo del móvil policial de la Comisaría 20ª de Angaco del caso que está siendo investigado por la Justicia de San Juan. Si bien la causa ya había sido formalizada, cuando los efectivos Matías Durán y Maximiliano Riveros señalados de ser autores del presunto delito de apremios ilegales en perjuicio de Armando Vázquez, de 44 años, en esta oportunidad se sumó a la oficial Emilce Gisel Pantano.
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Según los representantes de la UFI Delitos Especiales, Nicolás Schiattino y el ayudante fiscal Sebastián Gómez, en el transcurso de la investigación, se ha descubierto que la oficial en cuestión ha cometido una serie de delitos, respaldado por pruebas recopiladas.
Entre los ilícitos que se le imputan a la oficial se encuentra el incumplimiento de sus deberes como funcionaria pública, ya que tuvo conocimiento del hecho, pero no lo denunció. Además, se le acusa de proporcionar testimonios falsos, ya que “ha mentido en declaraciones relacionadas con el incidente y ha presentado testimonios contradictorios en relación con delitos especiales”.
Uno de los aspectos más preocupantes es que se alega que la oficial Pantano estuvo presente durante el procedimiento en cuestión, algo que el denunciante niega categóricamente. Esto ha llevado a la acusación de incumplimiento hacia su compañero y hacia sí misma, ya que se considera que ha fallado en cumplir con su función.
Es importante destacar que esta ampliación de objeto ha revelado detalles que no fueron mencionados en la acusación formalizada oportunamente por el Ministerio Público. En relación con el incidente, la oficial sostiene la misma versión que los oficiales acusados, pero con la agravante de que ella asegura no haber estado presente en el lugar de los hechos, mientras que la teoría del caso presentada por el Ministerio Público se basa en la afirmación de Vázquez, quien asegura lo contrario.
“La oficial había firmado las actas como que estuvo presente en el momento de la golpiza, pero según el denunciante, ella nunca estuvo y la vio en la Comisaría. Ella dijo que se quedó dentro del patrullero hablando por teléfono con su madre, pero después no pudo acreditar lo dicho”, dijo Gómez durante el relato de la plataforma fáctica.
El objetivo principal de esta ampliación de objeto es esclarecer los hechos y garantizar que se haga justicia. Por ello, la oficial será sometida a un proceso legal riguroso, donde se evaluarán todas las pruebas y testimonios recabados.
El caso
Según la denuncia, Armando Vázquez relató que en la madrugada del pasado 20 de abril, dos policías le abrieron la puerta de su auto con violencia, lo golpearon y lo subieron al patrullero. Esto se debe a que el denunciante, que había tomado alcohol en una cena con amigos, eligió quedarse a un costado de calle Nacional porque estaba con sueño. En este contexto, uno de ellos continuó golpeándolo y le dijo que se fuera de la zona.
“Andate de acá, dejá de dar asco", le habría dicho uno de los policías (Durán) a Vázquez, quien se negó a irse debido a su estado de ebriedad, y los policías lo golpearon nuevamente. Mientras, que el otro uniformado (Riveros) decidió patearlo en la cabeza y golpearlo cuando lo trasladaban esposado. “Ya te voy a dar que te hagas el malito, ya te voy a dar que no te quieras subir al patrullero”, le dijo este último.
Tras ser agredido, el denunciante fue llevado al hospital ese mismo día en la mañana, donde se constató que tenía muchas heridas. La médica que trabajaba para la UFI Delitos Especiales ratificó las lesiones en diferentes partes del cuerpo y dijo que tenían un tiempo de curación de 20 a 25 días.