Política
Intentaron asesinar a Cristina Kirchner: la jueza tomó el testimonio de la vicepresidenta
También participó el fiscal de la causa. Ambos fueron a la casa de la exmandataria.
POR REDACCIÓN
Este viernes, la jueza federal María Eugenia Capuchetti fue al barrio porteño de Recoleta para tomarle declaración testimonial a la vicepresidenta Cristina Kirchner tras el intento de magnicidio. La magistrada estuvo acompañada por el fiscal Carlo Rívolo, que junto a su colega Eduardo Taiano, son los tres funcionarios judiciales que están a cargo del expediente que se abrió para investigar el intento de asesinato a la exmandataria.
Capuchetti llegó en el marco del protocolo de seguridad que se aplica para los casos en los que una persona, en este caso Cristina Kirchner, se encuentra bajo amenaza. Una metodología similar se aplicará para tomarle declaración indagatoria a Fernando Sabag Montiel, el único detenido por el intento de homicidio contra la expresidenta: en lugar de ser trasladado a los tribunales de Comodoro Py, se espera que la jueza Capuchetti lo visite en su lugar de detención.
Más temprano, la magistrada visitó el lugar del ataque, pero no subió al departamento de CFK ni tuvo contacto con la titular del Senado. Tras permanecer unos minutos y dialogar con los efectivos de la Policía Federal Argentina (PFA) a cargo del operativo, regresó junto a los fiscales a Comodoro Py para continuar trabajando en el caso, publicó Infobae.
Durante la madrugada, funcionarios judiciales les tomaron declaración a los testigos del atentado. El hombre que intentó matar a CFK, identificado como Fernando Andrés Sabag Montiel, brasileño, de 35 años, se encuentra detenido en la sede policial de Cavia 3350 en el barrio porteño de Palermo, a la espera de ser trasladado para ser indagado por Capuchetti.
La zona amaneció hoy con una importante custodia de la Policía Federal Argentina (PFA) tras el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner. Además, mientras se llevan a cabo las pericias de rigor, se estableció un perímetro con una faja de color naranja con la leyenda “escena del crimen, no pasar”, la cual restringe el acceso a la zona donde se encuentra el departamento en el que reside la vicepresidenta.