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Policía retirado que mató al volante y volvió a manejar, preso en su casa
Sanz, policía retirado condenado por homicidio culposo, protagonizó un nuevo choque y fue sentenciado nuevamente. A pesar de tener dos penas, aún no se unifican debido a la apelación pendiente de su primera sentencia.
POR REDACCIÓN
José Segundo Sanz, un policía retirado de 72 años, fue condenado a prisión domiciliaria tras protagonizar un nuevo accidente de tráfico, este 9 de septiembre, cuando chocó a un motociclista y se dio a la fuga. La historia de Sanz es una de irresponsabilidad al volante, agravada por su historial de delitos viales y la controversia sobre la unificación de sus penas.
En mayo de 2024, Sanz fue condenado a tres años de prisión condicional y siete años de inhabilitación para conducir, tras ser hallado culpable de un homicidio culposo en perjuicio de una mujer, a quien atropelló y mató en un accidente ocurrido previamente. Sin embargo, esa sentencia no estaba firme en el momento en que Sanz salió nuevamente a la calle a conducir, violando las restricciones impuestas.
El 9 de septiembre, Sanz provocó un choque en el que, utilizando el mismo vehículo, un Chevrolet Corsa, colisionó contra un motociclista. Tras el incidente, huyó del lugar, pero fue detenido por la policía cerca del Parque de Mayo, a varios kilómetros del sitio del siniestro. A raíz de este nuevo hecho, Sanz fue imputado por lesiones y quedó detenido, con la intervención del fiscal Nicolás Schiattino y el visto bueno del juez.
En un juicio abreviado, Sanz aceptó una nueva condena: tres años de prisión efectiva, aunque será beneficiado con prisión domiciliaria debido a su edad avanzada y problemas de salud. Además, se le impuso cuatro años más de inhabilitación para manejar. A pesar de este nuevo fallo, la sentencia no se unificó con la condena anterior, ¿por qué?
La razón por la que las penas no se unificaron se debe a que la sentencia de homicidio culposo de mayo de 2024 aún no está firme. La condena original está en proceso de apelación, y el caso está a la espera de la resolución del juez de impugnación. Solo cuando esa sentencia quede firme se podrá determinar si se unifican las penas, según lo explicado por fuentes judiciales.
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Es importante destacar que, en los casos de juicios abreviados, la condena dictada queda firme a los pocos días de la audiencia, como ocurrió con la reciente sentencia de Sanz. Esto significa que, aunque aún está pendiente la resolución sobre la primera condena, la nueva pena que acepta Sanz ya es definitiva. Así, a partir de ahora, Sanz deberá cumplir con la prisión domiciliaria y estará prohibido de manejar durante los próximos cuatro años.