San Martín no tuvo ideas para sacar el partido a flote y en la última jugada lo perdió

San Martín hipotecó su futuro este domingo con la derrota en el Estadio Hilario Sánchez ante el colero San Telmo, por 2-1. Golpazo para el Verdinegro. Batacazo para el Candombero. Dos polos opuestos para una sola realidad que se repitió en el elenco de San Juan, que se tradujo en un equipo al que le faltaron armas para cambiar su limitada propuesta. El mismo que en el epílogo pudo quedarse con todo tras el remate de Arturia que dio en el palo, y que en la contra el ingresado Giménez acertó para dejar sin nada al equipo de Monasterio, a dos minutos del final.

El partido largó mal para San Martín y terminó peor. Lejos de aquel equipo que de local era invencible. Porque el Verdinegro, de los últimos 12 puntos en juego en casa, solo sumó cuatro. Una realidad que si bien en el cierre de la fecha 32 todavía lo sigue teniendo en puestos de clasificación al Reducido, ahora es con un pie afuera y cuando todavía debe cumplir fecha libre donde no sumará.

San Telmo, que llegó a San Juan último en la grupo y en zona de descenso, se encontró con la apertura del marcador a los 8’ con el gol en contra de Bontempo en una acción desafortunada. Y desde ahí, casi con el inicio mismo, el libreto de San Martín se rompió y nunca tuvo un plan alternativo. Fue ir sin convicción, reiterativo, errático, sin convicción.

Porque luego del gol entró en la desesperación, la que lo acompañó todo el partido. Pasó a un juego acelerado que lo llevó a perder precisión. Tener la pelota no fue suficiente. Llenó de envíos desde la derecha a la defensa de San Telmo, con la particularidad que casi en su totalidad estos centros de Molina fueron defectuosos, que solo facilitaron el trabajo defensivo de la visita que por momentos defendió con cinco.

Fue el partido que marcó el regreso, tras la lesión, de Nicolás Franco al equipo. Pero al delantero la pelota nunca le llegó y por arriba los centros fueron improductivos en su totalidad.

Con el partido siempre cuesta arriba, en el segundo tiempo Monasterio cambió nombres, pero mantuvo el 4-3-1-2. Ludueña trató de marcarle un camino complicado por no tener sociedad. Así, desplegó toque y circulación en el medio, pero sin profundidad y ni ataque. Buscó sin jerarquía ni sorpresas.

No obstante, llegó al empate a los 22’ con un volea de Sebastián González en un acción que la defensa de San Telmo se durmió. El 1-1 despertó al autor del gol para crear juego y acercarse a Ludueña. Parecía la reacción verdinegra, pero volvió a caer en falta de recursos y en la desesperación. Porque no aprovechó ser el dueño de la pelota, situación que lo marcó siempre.

Y dentro de lo poco claro en la ofensiva pudo quedarse con la victoria en el final, pero el palo se lo negó a Arturia y en la salida San Telmo se quedó con triunfo que lo sacó del descenso y el fondo de la tabla. Otra partido de local que San Martín dejó pasar, pero que en esta fecha fue diferente, ya que tuvo un desempeño limitado, preocupante para sus aspiraciones de ascenso.

El dato

El próxima partido será dentro de dos semanas ante Agropecuario, puesto que el juego ante Almagro fue postergado para el 20 de septiembre debido al compromiso del rival por Copa Argentina.