Policiales > Lo que arrojó la autopsia
Muerte en el Médano de Oro: el conductor tenía 1.72 grs. de alcohol en sangre
La autopsia al conductor de la camioneta que volcó en el Médano de Oro, en Rawson, arrojó que tenía el triple de alcohol en sangre del permitido. Su acompañante estaba apto para conducir.
Por Ariel Patruceli
Este martes 23 de julio se dieron a conocer datos precisos de las autopsias a los fallecidos del vuelco ocurrido el pasado domingo 21, a la 1.40 de la madrugada, en el Médano de Oro. El conductor de la camioneta tenía más del triple de alcohol en sangre de lo permitido para conducir un vehículo y su acompañante, quien también murió, estaba apto para manejar.
En diálogo a DIARIO HUARPE, el ayudante de fiscal Maximiliano Gerarduzzi, brindó detalles del resultado de las autopsias que se les practicó a los dos ocupantes de la camioneta Ford Ranger que fallecieron el pasado domingo en la madrugada tras un vuelco adentro de un canal. Según el detalle, Oscar Walter Rodríguez (37) tenía 1.72 gramos de alcohol en sangre, más del triple del permitido por la ley vigente para conducir un automóvil, que es de 0.50 gramos.
En tanto la autopsia de Aarón Benjamín Leyes, de 18 años, el otro fallecido, indicó que el joven tenía 0,40 gramos de alcohol en sangre, lo que lo habilitaba para conducir en caso de contar con registro. Entre otros datos del análisis forense, surgió que Rodríguez falleció por múltiples golpes en su cuerpo, que provocaron un shock traumático hiperbólico (hemorragias internas), lo mismo que la otra víctima fatal.
Cabe recordar que en la camioneta viajaban otras tres personas en los asientos traseros, de las cuales dos, Carla Marcela Ochoa y Gabriel Maximiliano Núñez fueron trasladados al Hospital Doctor Guillermo Rawson.
Radiograma de los lesionados
Ochoa presentaba TEC (traumatismo encéfalo craneano) fractura de nariz, traumatismo cerrado de tórax y traumatismos múltiples. En tanto Núñez presentaba TEC, traumatismo facial, y traumatismos múltiples, pero ya están fuera de peligro y el tercer ocupante que iba en los asientos traseros, Héctor Enrique Rodríguez, fue asistido en el lugar porque no presentaba lesiones graves.
Con el correr de las horas se conoció que cuatro de los ocupantes regresaban del departamento 9 de Julio, tras haber compartido un encuentro en la casa de la hermana de Ochoa y en el camino alzaron al quinto ocupante de la camioneta.
Cuando se produjo el siniestro fatal, el grupo de amigos se disponía a ir a una peña en el departamento Pocito, según la información recabada por los funcionarios de la UFI Delitos Especiales.
Otro dato que se conoció y que podría a esclarecer o ayudar a reconstruir el hecho, fue una declaración en sede judicial, de una persona que acompañaba al grupo, pero en otro auto, quien dijo que antes del vuelco, vio que un vehículo se acercaba de frente por calle 11, pero tenía luces y no habría visto al auto sin luces que mencionó uno de los ocupantes de la camioneta.
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Al resto de los ocupantes de la camioneta, no se les habría hecho test de alcoholemia porque para el desarrollo siniestro vial, no sería de importancia, ya que no tendrían incidencia en el mismo, explicaron las autoridades judiciales.
Con el resultado de la autopsia que ofrece un marcado estado de alcoholismo del conductor de la camioneta, para los fiscales es más fácil entender que se trató de una imprudencia al volante por la graduación alcohólica que presentaba el conductor del rodado.