Amor por las motos y por la aventura: el color del Moto Turismo en San Juan

Este fin de semana largo, San Juan se llenó de aventureros y motoviajeros que llegaron desde todos los puntos del continente para congregarse en el evento del Moto Turismo 2024. Con shows y viajes al interior de la provincia, los miles que llegaron quedaron impactados por los bellos paisajes, como así también la calidez de la gente. Entre charlas, salieron a la luz historias y anécdotas de estos aventureros que viven el día a día. Uno de ellos es Carlos Ludueña, quien es un sanjuanino apasionado de las motos que adquirió una Harley-Davidson del año 1937 y la restauró por sí mismo para salir a recorrer las calles sanjuaninas. Además, desde Buenos Aires, llegó una pareja aventurera todoterreno que, aparte de las motos, aman el océano y atravesaron el Atlántico a bordo de un velero.

Pablo y Alejandra, el matrimonio que desde hace más de 40 años hace de su vida una aventura. Foto: Diario Huarpe.

Ludueña dialogó con DIARIO HUARPE y mencionó que esta moto que tiene en su poder es una de las únicas en esta provincia, ya que es muy antigua y otras simplemente se las han llevado de San Juan. “Es una Harley-Davidson de 1937 y está funcionando en perfectas condiciones”, dijo. El moto aventurero mencionó que este vehículo fue adquirido y restaurado por él y su hijo, con quien comparte una misma pasión por las motos.

“A esta moto la usamos, tenemos otras motos y todos salimos a dar una vuelta los domingo o para fechas importantes, como lo es este evento y es un elemento de distracción para uno. Con la moto uno se distiende y bueno, la magia de todo esto es que uno puede interactuar con ella, puede arreglarla, meterle mano, hacer muchas cosas”.

Adquirirla no fue una tarea fácil para Ludueña, quien remarcó que todo esto se debe al trabajo, esfuerzo y perseverancia. “La compré vendiendo otras cosas que tenía y la pasión por las dos ruedas nació en los años ’70, cuando había un grupo de motoqueros en San Juan y yo los veía mucho. Era algo que estaba dentro de mí y día a día pensaba que en algún momento yo iba a tener una moto, hasta que lo conseguí”, finalizó.

Aventureros todoterreno

Pablo Prada y Alejandra Ferroni son de Buenos Aires. Siempre se destacaron por su amor a la aventura en todas sus expresiones. Pablo trabajaba como guardaparque nacional, mientras que Alejandra es contadora. Actualmente, llegaron a la provincia para el evento del Moto Turismo a bordo de una combi, en la que trasladaron su moto, pero su vida no fue siempre así. En el año 2013, habían dejado las dos ruedas de lado y se adentraron en una aventura mayor: con un velero de 10 metros, cruzaron el océano Atlántico. Salieron desde Río de Janeiro, Brasil, hasta Ciudad del Cabo, Sudáfrica.

El matrimonio estuvo en total 82 días a bordo del velero para cruzar el Atlántico ida y vuelta.

“Decidimos en 2013 cruzar el Atlántico en velero y llegamos a Sudáfrica. La idea era dar la vuelta al mundo, pero hubo algunos problemas. Teníamos hijos y nietos en casa entonces ese fue el incentivo pata volver. Por fuera de eso, también somos apasionados de las motos y nos gusta viajar pro Argentina. Estamos un poco grandes por lo que tenemos que cuidarnos un poco más, pero ese proyecto del velero fue nuestro Everest, llegamos al tope de la aventura y estamos muy orgullosos”.

Un atardecer a bordo del "Ave Fénix", nombre que le colocaron al velero donde realizaron su expedición.

Por su parte, la mujer mencionó que el recorrido no fue fácil y que lo hicieron bastante tranquilos, ya que se demoraron 40 días en la ida y 42 días en la vuelta, a bordo del velero de 10 metros de longitud. “Pasaron muchas cosas. Los primeros tres días tuvimos una tormenta que creíamos que nos hundía. Nos encontramos con una isla en el medio del océano con la cual casi chocamos, además de muchísimas ballenas que nos querían voltear”, contó.

“Nuestra familia nos dijo que estábamos locos, pero toda nuestra vida fue así, por lo que no fue tan sorpresivo para ellos. Los que más se preocuparon fueron nuestros nietitos, que tenían temor de que nos pase algo. Hace 43 años estamos casados y siempre es importante tener a alguien que te acompañe y te soporte. Tenemos siempre la idea de que la vida se vive una sola vez y cuidándola siempre se puede disfrutar”.

Por último, mencionaron que su visita a San Juan era un objetivo pendiente, ya que la región de Cuyo era la que les faltaba recorrer a bordo de su vehículo. Con el evento como excusa, pudieron llegar a la provincia para disfrutar de un fin de semana largo a pura aventura y este domingo viajaron a Barreal para disfrutar de los paisajes sanjuaninos. Concluyeron agradeciendo a los sanjuaninos por el cálido recibimiento que les han dado en estos últimos días.