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Abusó, zamarreó y mató a su hijastro de 4 años: la querella pidió prisión perpetua
POR REDACCIÓN
La Justicia ya juntó las pruebas necesarias para incriminar a Ezequiel Contreras, el padrastro que abusó, zamarreó y mató a Exequiel Cuello, un pequeño de 4 años, en el departamento Chimbas. Con todo el material en las manos, la Fiscalía pidió la elevación de la causa a juicio por lo que se espera que en los próximos días se conozca cuándo finalmente tendrá que comparecer ante el juez del Tercer Juzgado de Instrucción, Guillermo Adárvez.
La figura penal que le enrostran es grave. Sobre Contreras pesa la comisión de un abuso sexual con acceso carnal agravado en concurso real con homicidio agravado por el vínculo. Por este motivo es que la parte querellante, representada por la doctora María Filomena Noriega, pidió prisión o reclusión perpetua. El hombre llegará a esta instancia en calidad de detenido: actualmente se encuentra en el Servicio Penitenciario Provincial.
El pequeño murió producto de una hemorragia cerebral. Los médicos determinaron que fue sometido a un abuso sexual que, en principio, fue negado por el implicado. Más allá de este avance judicial, en las próximas horas esperan que Tamara, madre del pequeño, sea convocada por un cuerpo de psicólogos para realizarle una entrevista de lo que ocurrió aquella mañana del 19 de diciembre y cómo se encuentra actualmente a las puertas de una condena definitiva para el hombre que le arrebató a uno de sus hijos.
El hecho
Todo ocurrió el 19 de diciembre de 2019. Contreras quedó al cuidado del pequeño cuando su mamá salió con los otros tres hijos hacia el vacunatorio. Ese momento fue aprovechado por el implicado para ultrajar a la víctima sexualmente. El hecho se dio en el transcurso de tres horas (de las 6 a las 9), es decir, el tiempo que la mujer estuvo ausente. El escenario fue la casa que compartían en el departamento Chimbas.
Tamara regresó y se encontró con el niño durmiendo, hasta allí no notó nada raro. Contreras ya lo había bañado. Aseguran que tras perpetrar los salvajes ataques sexuales llevó al chico hasta la ducha en donde, por los intensos gritos del menor, comenzó a zamarrearlo provocándole serias lesiones en su cerebro.
La víctima quedó inconsciente al punto de no responder los llamados de su mamá a la hora de comer. Esto alertó a la mujer que rápidamente consultó con su pareja cuando este ya se encontraba trabajando. Sin obtener demasiadas respuestas, la madre llevó al niño hasta Urgencias del Hospital Guillermo Rawson.
Los médicos determinaron el abuso sexual y la hemorragia interna que la víctima presentaba en su cabeza. El pequeño quedó internado hasta que el 23 de enero del 2020 murió. El padrastro se hizo el desentendido, pero su pareja terminó incriminándolo.