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¿Hay que tener título para ser presidente de la Argentina?
Es muy común incurrir en el error de creer que, para ser presidente de la Nación, es necesario tener el título de abogado. Por cierto, jamás la Constitución Nacional exigió esa condición para ejercer la primera magistratura.
Por Félix V Lonigro
Es muy común incurrir en el error de creer que, para ser presidente de la Nación, es necesario tener el título de abogado. Por cierto, jamás la Constitución Nacional exigió esa condición para ejercer la primera magistratura.
Del mismo modo, ninguna constitución provincial exige ese requisito para ser gobernador de provincia. En el caso de San Juan, su constitución prevé que, para ser gobernador o vicegobernador, es necesario contar con 30 años de edad; ser argentino nativo, o por opción (es decir, hijo de padre o madre nativos si quien se postula nació en el exterior), o nacionalizado si el candidato, aún sin tener padres nativos, adquirió la ciudadanía con diez años de antelación a la postulación; y además ser elector habilitado con cinco años de domicilio en la provincia.
De cualquier manera, y más allá de que la elección del ingeniero Mauricio Macri en 2015 (primer presidente no abogado desde el retorno de la democracia) ha demostrado que no es necesario ser abogado para accede a la presidencia de la Nación, es lógico que el hombre común incurra en ese error, porque de los diferentes treinta y cuatro presidentes constitucionales que gobernaron la Argentina desde 1854, veintitres fueron abogados.
Ellos han sido Santiago Derqui, Nicolás Avellaneda, Miguel Angel Juárez Célman, Carlos Pellegrini, Luis y Roque Sáenz Peña, José Evaristo Uriburu, Manuel Quintana, José Figueroa Alcorta, Victorino de la Plaza, Hipólito Yrigoyen, Marcelo T. de Alvear, Roberto Ortiz, Ramón Castillo, Arturo Frondizi, José María Guido, Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Fernando de la Rúa, Adolfo Rodríguez Saa, Eduardo Duhalde, Néstor Kirchner y Cristina Fernández.
De los once restantes presidentes, hubo un médico (Arturo Illia), un odolontólogo (Héctor J. Cámpora), dos ingenieros (Agustín P. Justo y el actual presidente Mauricio Macri), cinco militares (Justo José de Urquiza, Bartolomé Mitre, Julio A. Roca, Agustín Justo –quien además de ingeniero también era militar de profesión- y Juan Domingo Perón).
Por su parte hubo tres presidentes que no tuvieron título alguno, como Domingo Faustino Sarmiento, María Estela Martínez de Perón y Raúl Lastiri.
De los veintitrés presidentes abogados antes mencionados, quince (el cuarenta y cinco por ciento) egresaron de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires: Nicolás Avellaneda, Carlos Pellegrini, Luis Saenz Peña, Roque Saenz Peña, Victorino de la Plaza, José Evaristo Uriburu, Manuel Quintana, Hipólito Yrigoyen, Marcelo T. de Alvear, Roberto Ortiz, Ramón Castillo, Arturo Frondizi, Raúl Alfonsín, Adolfo Rodríguez Saa y Eduardo Duhalde.
Si analizamos a los nueve precandidatos a presidente que competirán en las primarias abiertas simultáneas y obligatorias del próximo 11 de agosto (Mauricio Macri, Alberto Fernández, Roberto Lavagna, José Luis Espert, Nicolás del Caño, Manuela Castañeira, Juan José Gomez Centurión, José Antonio Romero Feris y Alejandro Biondini) solo dos son abogados: Alberto Fernández y José Antonio Romero Feris.
Si en las elecciones presidenciales del 27 de octubre próximos triunfara Mauricio Macri, sería la primera vez en la historia de la Argentina, en la que un candidato no abogado ni militar es elegido dos veces para ejercer la primera magistratura. Si en cambio triunfaran Roberto Lavagna o José Luis Espert, sería la primera vez que un economista conduciría los destinos de la Nación.