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Bocinazo de los médicos sanjuaninos contra la imputación de 3 profesionales
Mostraron su descontento con el Gobierno y la Justicia tras la confirmación del cuarto caso de coronavirus.
Por Gustavo Bruni
La calma de la tarde sanjuanina por el feriado del 25 de mayo se vio alterada con una nueva protesta de médicos autoconvocados contra la situación que vivieron dos profesionales de la salud la semana pasada tras detectarse el cuarto caso de coronavirus en la provincia. Específicamente la convocatoria fue contra la imputación de la Justicia de 3 profesionales sanjuaninos y por la misma situación de 2 médicos en Córdoba.
Decenas de vehículos se reunieron en las puertas del hospital Guillermo Rawson y partieron desde allí en caravana haciendo sonar la bocina hacia el hospital Marcial Quiroga pasando por el Centro Cívico y la Casa de Gobierno.
Más de 6 cuadras de automóviles encararon por Avenida Libertador y a bordo iban profesionales de la salud cada uno con su barbijo, carteles y los típicos guardapolvos blancos. Consignas como “Basta de condenar inocentes” o “La salud está de luto” pudieron verse inscriptas en los papeles que los médicos llevaban adheridos a sus autos.
Ante la masividad de la convocatoria, la Policía debió acompañar a la columna de manifestantes y en varias ocasiones tuvo que cortar el tránsito en las calles perpendiculares a Libertador para permitir el paso de la caravana.
De esta forma los médicos demostraron el malestar que existe de parte del sector hacia el Gobierno provincial, luego de la confirmación del tercer y cuarto caso de coronavirus.
Hay que remarcar que el 5 de mayo, tras llegar en un vuelo sanitario desde Buenos Aires donde en dos oportunidades los test dieron negativos, un transportista de 43 años fue diagnosticado con Covid-19. El hombre quedó internado en el hospital Guillermo Rawson.
Días después se confirmó que una médica de 42 años y hermana del tercer infectado también había contraído la enfermedad por contacto estrecho. A raíz de que la profesional violó los protocolos e ingresó a la habitación de su hermano, el Ministerio de Salud Pública le inició un sumario administrativo como también efectuó una denuncia penal por poner en riesgo la salubridad de la población.
La tensión creció el miércoles cuando el gobernador Sergio Uñac en conferencia de prensa anunció que separaba del cargo al jefe de Terapia Intensiva de Adultos, Carlos Lezcano, y la jefa de Infectología del Hospital Rawson, Sandra Ferrari.
En la madrugada del jueves dos médicos fueron detenidos: la infectóloga del Hospital Marcial Quiroga, Rosita Contreras, y el responsable de los vuelos sanitarios, Javier Porras. Ambos profesionales estuvieron varias horas en la Central de Policía hasta donde un grupo de médicos llegó y pidió su liberación. Todo esto ocasionó la primera protesta de los médicos que se realizó el jueves por la mañana en el hospital Rawson.
Un día después el Gobernador le ordenó a la ministra Alejandra Venerando que Lezcano y Ferrari fueran restituidos en sus cargos. No obstante, la tirantez en la relación entre los médicos y el Gobierno no cedió. Mientras el juez Alberto Caballero continúa la investigación a partir de las escuchas telefónica para determinar si hubo una "planificación" y "abuso de autoridad" por parte de los profesionales que permitieron el vuelo sanitario.
Esto a tal punto que entre los fundamentos de la marcha de este lunes, los profesionales señalaron que la intención fue “defendernos de abusos, amenazas e imputaciones”.