Crisis económica en Argentina: 7 de cada 10 niños de escuelas públicas son pobres

El reciente informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la Universidad Católica Argentina (UCA) ha arrojado cifras alarmantes sobre la pobreza infantil en el país, evidenciando que 7 de cada 10 niños que asisten a escuelas públicas se encuentran bajo la línea de pobreza. Estas estadísticas se suman a los hallazgos de Unicef, apuntando a una situación crítica que afecta a millones de menores argentinos.

La crisis económica que azota a Argentina ha dejado profundas cicatrices en su población más vulnerable, especialmente en los niños y adolescentes. Los informes revelan una realidad desgarradora, donde la mayoría de los estudiantes de escuelas públicas enfrentan condiciones de pobreza, lo que plantea desafíos adicionales en su educación y desarrollo.

El estudio de la UCA destaca que el 62,9% de los niños y adolescentes escolarizados en el país viven en la pobreza, siendo las escuelas públicas las más afectadas, con un alarmante 71,6% de sus alumnos bajo esta situación. En contraste, solo 3 de cada 10 estudiantes de escuelas privadas se encuentran en la misma condición, aunque sigue siendo una cifra significativa.

Los datos revelan también que el 16,2% de los alumnos argentinos se enfrentan a la indigencia, subrayando la gravedad de la situación económica que atraviesan muchas familias en el país.

Este informe, que fue presentado este lunes y corresponde al segundo semestre de 2023, sugiere una leve mejoría con respecto a las cifras del año anterior, aunque la situación sigue siendo preocupante.

Los investigadores detrás del informe, Ianina Tuñón y Matías Maljar, han hecho hincapié en la necesidad de políticas públicas orientadas a apoyar a las poblaciones más vulnerables, especialmente a aquellos niños que, a pesar de asistir a escuelas privadas, enfrentan dificultades económicas significativas.

Este estudio se suma a los hallazgos de Unicef, que también alertó sobre la magnitud de la pobreza infantil en Argentina, afectando a cerca de 8,6 millones de menores de 18 años. La crisis económica continúa siendo uno de los mayores desafíos del país, y la protección y el bienestar de sus niños y adolescentes deben ser prioritarios en la agenda política y social.