Lucía Ponce, lleva la inclusión de personas ciegas como estandarte

Lucía Ponce es la embajadora de San Martín. Actualmente se dedica a su emprendimiento que busca la inclusión a través de la innovación creando piezas con escritura braille, pero además contempla la dimensión sustentable y de soberanía alimentaria, ya que los restos son usados en la fabricación de lápices que contienen semillas, las cuales una vez usados se pueden hidratar y plantar.

Se describe como una persona emprendedora, tenaz, dinámica, que busca siempre cumplir sus sueños y lucha por ellos.

Sobre la decisión que la llevó a presentarse como embajadora fue  el pedido de su entorno, familia y amigos, sumado al cambio de reinas a embajadoras, ya que en esta modalidad sentía que podía mostrar otras dimensiones, tanto ella como sus compañeras, que son madres, alumnas o trabajadoras.

Respecto al rol de embajadora, Lucía lo define como la posibilidad de ser vocera, de emitir mensajes en los cuales se pueda trasmitir valores e ideas,  además de poder concientizar en diversos temas, por último, destaca que es la posibilidad de actuar directamente en la vida de otras personas. En caso de ser embajadora, le gustaría profundizar en el trabajo que ya está realizando, es decir, incluir a personas ciegas, crear material para que puedan usar en su vida cotidiana, además de fomentar el cuidado del medio ambiente. Cree que con pequeños actos diarios se puede hacer una diferencia significativa.

En relación a los cambios, la representante sanmartiniana lo evalúa como correcta, este cambio de reina a embajadora lo siente liberador, ya que les permite expresarse y mostrarse sin presiones, decir por lo que luchan y qué las motiva.

Sobre su departamento, lo describió como pujante, hace un recorrido por su historia y destaca que de ser una comuna productiva, actualmente se la reconoce por su turismo. Sobre esto, destacó el predio Ceferino Namuncurá o el camping municipal, y sus fiesta que convocan principalmente a un público familiar, como el festival del asador o las peñas de la familia.

Cuando se habló de evolución, ella lo define como la posibilidad de cambiar, tranformarse en mejores versiones y así alcanzar la felicidad.

Por último destacó tres momentos que la hacen ser quien es. En primer lugar recordó a su familia, quien ella define como sus “ángeles guardianes”, que la acompañan y está en el lugar que está gracias a su apoyo. El segundo momento está relacionado con su hijo, es su faro y lo que la motiva a levantarse y a esforzarse a ser mejor. El tercer y último momento está conectado con su emprendimiento, el mismo lleva más de dos años, este es un espacio que representa y con el quiere visibilizar a las personas ciegas además de lograr una mayor conciencia ambiental.