Judiciales > Por la condena de encubrimiento
Julián Gil perdió su matrícula de abogado, pero apelará la decisión
El Tribunal de Disciplina del Foro de Abogados decidió quitarle la matrícula de por vida al exintendente de Caucete, Julián Gil, debido a su condena por encubrimiento agravado, una medida que el letrado ya anunció que apelará, calificándola de "ensañamiento extremo".
POR REDACCIÓN
En una resolución que ha generado gran repercusión en el ámbito legal y político de San Juan, el Tribunal de Disciplina del Foro de Abogados le quitó la matrícula de abogado a Julián Gil, el exintendente de Caucete, lo que implica que no podrá ejercer la profesión de por vida. La medida, según fuentes judiciales citadas por 0264 Noticias, se fundamenta en su condena por encubrimiento.
Ante esta drástica decisión, no ha tardó en expresar su total desacuerdo. En declaraciones a DIARIO HUARPE, el exjefe comunal afirmó rotundamente: "Voy a apelar esa resolución". Gil manifestó no estar de acuerdo "con los fundamentos ni con el ensañamiento extremo de la medida".
La sanción disciplinaria se deriva de una condena judicial firme por encubrimiento agravado, un delito por el cual Gil intentó influir y modificar la declaración de una víctima de abuso sexual para beneficiar a un defendido suyo. Este accionar contraviene la Ley Orgánica del Ejercicio de la Abogacía, la 127 A, que en su artículo 79 establece la exclusión de la matrícula por "condena judicial firme cuando, de las circunstancias del caso, se desprendiera que el hecho afecta el decoro y ética profesionales". El Tribunal de Disciplina consideró que la conducta del letrado encuadra en dicha afectación.
Julián Gil, quien ya fue debidamente notificado de la resolución, tiene ahora la opción de presentar su apelación ante el Directorio del Foro como primera instancia. Se anticipa que hará uso de este recurso, lo que iniciará un plazo de 25 días hábiles para las tramitaciones y notificaciones internas. Posteriormente, el máximo órgano de la institución dispondrá de 30 días hábiles para confirmar o revocar la sanción. Un aspecto crucial es que la apelación suspende la sanción hasta que la decisión quede firme. En caso de un nuevo revés en el Directorio, aún podría recurrir al Juzgado Contencioso Administrativo como última alternativa.
La figura de Gil no es ajena a las controversias públicas. Durante su mandato como intendente de Caucete (2015-2019), su gestión estuvo "cargada de polémicas y escándalos". Fue criticado, incluso por medios nacionales, por nombrar a su esposa, sus dos hijos y dos hermanos en su gabinete, y enfrentó una acusación de abuso sexual que, si bien fue archivada, mantuvo su figura en el ojo de la tormenta.
Respecto a la condena que desencadenó esta drástica medida disciplinaria, fue detenido en Tribunales el 21 de agosto de 2024, tras una investigación en su contra. El expediente reveló que entregó dinero a una mujer, quien era víctima de un abuso sexual, con el fin de que cambiara su versión de los hechos en beneficio de la persona que él defendía. Tras la confesión de la denunciante, reconoció su responsabilidad penal en este y otro hecho similar, aceptando en un juicio abreviado una condena de un año de prisión en suspenso por encubrimiento agravado, impuesta por la jueza Verónica Chiconi.
Con este antecedente firme, el Tribunal de Disciplina actuó de oficio para aplicar la sanción. Para la exclusión de la matrícula se requiere el voto de los dos tercios de los cinco miembros, y en este caso, se presume que la sentencia habría sido por unanimidad. A pesar de que la sanción es de por vida, la ley contempla la posibilidad de que Gil pueda solicitar la rehabilitación de su matrícula a los cinco años de que la sentencia quede firme, lo cual requeriría la decisión favorable de las dos terceras partes de los miembros del Tribunal, a pedido del interesado.