Provinciales > Con ayuda de israelíes
Para salir de la crisis hídrica, quieren que un solo organismo gestione toda el agua
Por Carolina Putelli
La visita de la embajadora de Israel a San Juan, Galit Ronen, dejó un anticipo de cómo podría ser el futuro de la gestión hídrica en la provincia. Si se cumple el acuerdo, que cuenta con el apoyo de las autoridades locales, en 18 meses podría cambiar la estructura gubernamental que gestiona el agua. El objetivo es que haya una sola autoridad que tome todas las decisiones, tal como funciona hoy en día en el país de Medio Oriente. Esto podría hacerse, incluso, reforzando Hidráulica que hoy es el organismo con mayor peso en las decisiones.
Según confirmó el secretario del Agua, Ramiro Cascón, a DIARIO HUARPE, han iniciado conversaciones con Mekorot, la compañía nacional de agua de Israel, para que una misión de técnicos trabaje con sanjuaninos para diseñar una nueva estrategia. Si firman, los israelíes podrían capacitar a los locales para la creación y adecuación del sistema local para que haya una sola autoridad con decisión total.
El modelo que utilizan en Israel contempla un solo organismo, Mekorot, que conoce la cantidad de agua disponible total y decide cuánto asignará a cada sector. Así, definen un porcentaje para industrias, otro para la agricultura y para consumo humano o cualquier otro usuario. Una vez distribuidos estos derechos de uso, hay otros órganos que toman decisiones respetando el cupo.
El acuerdo podría cerrarse pronto y según Cascón “hay intención política de que así sea”. Si finalmente acuerdan en un plazo de un año y medio, podrían crear un plan estratégico de gestión integral de las cuencas hídricas con esta visión. El funcionario aclaró que si bien hay intención de trabajar con este modelo, no quieren que sea “importar una receta”, sino recibir asesoramiento y acordar un trabajo conjunto para lograr una solución acorde a las necesidades y estructuras de San Juan.
A la vez, una de las claves para que el modelo israelí funcione es que haya una medición exacta de uso de todos los sectores y además del funcionamiento de todas las redes. Si bien en la provincia la agricultura es a la que se le designa mayor volumen, más de 36.000 litros por segundo en la última temporada, los cálculos son aproximados. Tampoco hay un registro de cuántas perforaciones hay extrayendo agua subterránea para riego.
Un cambio histórico de toda la estructura provincial
Si San Juan avanza a un modelo de un organismo superior con mayor capacidad de decisión, significaría un cambio radical. Incluso deberían hacer cambios en la legislación actual, que plantea un manejo hídrico que está dividido en distintos niveles y organismos que pueden o no trabajar juntos.
Hoy la Dirección de Hidráulica es la cartera con más control, ya que decide cuánta agua se eroga de los embalses y el coeficiente que se entra al agro, principal usuario, para riego. Pero su control es limitado en cuanto al uso del agua subterránea, existen departamentos cuyo riego se hace con toma directa del río y depende en gran medida de lo que voten los regantes. A su vez, el agua para consumo humano la gestiona OSSE y existe la Secretaría del Agua, que tiene un rol superior, pero no decisión directa.
En este escenario, la toma de decisiones estratégicas e integrales es más difícil. Un ejemplo fue durante la temporada verano 2021 – 2022, cuando una comisión integrada por los organismos que están a cargo del mantenimiento de embalses y represas hidroeléctricas pidió reducir el riego. La Dirección de Recursos Energéticos, especialistas y el EPSE presentaron una propuesta para que no se sacara tanta agua de las reservas para mantener el nivel de seguridad. Pero esto se topó con que los regantes que participan de Hidráulica se negaron. Hubo cruces, una reunión muy tensa, marchas y finalmente un acuerdo intermedio.
A la vez, las decisiones de extraer agua subterránea que se propiciaron en los últimos meses han afectado las reservas de agua subterránea. En San Juan hay representantes del Instituto Nacional del Agua, que alertaron la sobre explotación, pero como no participan de las instituciones que toman decisiones, solo pueden hacer un aporte externo.
De cara al futuro, que según especialistas tendrá crisis hídricas más seguidas y más graves, la gestión integral de la cuenca es clave. Para evitar que se profundicen los problemas tanto años buenos como malos es necesario pensar todo el sistema como uno solo para que las urgencias de unos no afecten al resto.