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Sociedad > Historia

Se quedó muda a los 12 años, vomitó una moneda y volvió a hablar

La mujer creía que la falta de voz era un castigo de lo alto. Los profesionales de la salud ahora se excusan en que, al estar el objeto en la garganta, no se podía observar mediante una radiografía.

POR REDACCIÓN

27 de octubre de 2019

La historia de Marie McCreadie comenzó hace varios años. El inicio del relato fue principios de la década de 1970 cuando la mujer se mudó de Londres a Australia con su familia para empezar una nueva vida. Nunca se imaginó que se quedaría muda siendo muy chica. Pero menos lo que pasó tiempo después.
Se estaba acomodando a su nuevo hogar y aprendiendo un nuevo lenguaje cuando algo que no estaba en los planes cambió todo. “Me desperté con un fuerte dolor de garganta y con un gran resfriado; uno o dos días más tarde tuve bronquitis”, contó Marie a medios locales.

En la primera semana en la cual se sentía mal, la irritación de su garganta era “muy intensa” por la fiebre. Cuando bajó la temperatura, la infección en su pecho había desaparecido –seis semanas después–, hasta empezó a sentirse mejor, “normal”, explicó, y añadió: “Pero mi voz no regresó”.
Ella imaginaba que era cuestión de tiempo, uno breve, para que recupere el habla. A medida que pasaron los días, se dio cuenta que no sólo estaba comprometida el habla, sino que tampoco podía emitir ningún tipo de sonido. Ni su tos emitía ruido, ni una voz ronca, una risa sofocada, un susurro, nada.
Por lo ocurrido la mujer acudió a varios doctores y recibió diversos diagnósticos. Todos equivocados. Los profesionales de la salud llegaron a decirle que padecía de mutismo histérico, un trastorno de la función vocal que no depende de la función del cuerpo, ya que el silencio se da de forma voluntaria.

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El médico de la familia creía que Marie se negaba a decir alguna palabra. Claramente no era así, o por lo menos ella no lo sentía así. Su vida cambió para mal. Lo que antes resultaba algo simple, como llamar por teléfono, se le volvió una odisea. Si tenía un accidente, no podía gritar. Algo que le generaba temor a la hora de decidir qué actividad hacer durante el día.
Una monja, en el colegio católico al cual asistía, llegó a decirle, al no haber razón física de estar muda, que dios la estaba castigando. Su vida en la escuela también cambió radicalmente. "Yo siempre llevaba pequeños cuadernos de notas y un lapicero, y me dedicaba a escribir. Algunos de mis amigos podían leer los labios, pero no siempre. A veces no podía meterme en las conversaciones", señaló la mujer a un medio británico.

A los 14 años trató de quitarse la vida. Se recuperó, pero no volvió a la escuela sino que fue derivada a un centro neuropsiquiátrico.
Marie sufrió varias frustraciones y vergüenzas, no pudo formar parte del coro del colegio, no podía conversar con compañeros. "Yo solo quería gritarles, pero me lo tenía que guardar todo para mí. Tenía toda esa rabia e ira dentro que no podía liberar. Estaba enojada conmigo misma por no poder comunicarme y me culpaba por eso", describió.

 

Shellharbour City Library Shellharbour City

Posted by Marie McCreadie on Tuesday, October 8, 2019

 

"Eso fue un infierno, una pesadilla. Había drogadictos, personas con crisis nerviosas, una mujer que creo que había sufrido abusos... Yo era la más joven y era muy influenciable", dijo Marie, que logró escapar de ese lugar y, convencida de que no recuperaría la voz, trató de reconstruir su vida. Aprendió lenguaje de signos, volvió a estudiar y aprendió mecanografía.
Tiempo después, cuando tenía 25 años, comenzó a sentirse muy mal en el trabajo. "Empecé a toser y me salió sangre de la boca. Pensé que me moría. Podía sentir algo moviéndose en el fondo de mi garganta. En un momento dado pensé que estaba tosiendo mis entrañas. Ahora parece una estupidez, pero en ese momento tu cabeza da vueltas", agregó Marie.

 
WOMAN LOSES HER VOICE FOR 12 YEARS

Marie McCreadie was just thirteen when she lost her voice for twelve long years.. The incident impacting dramatically on her formative years. Miraculously her voice returned, and thirty five years later, she's written a book about her experience. For the first time, she will speak publicly about the ordeal tomorrow at Shellharbour Library.

Posted by WIN News Illawarra on Sunday, October 6, 2019


Una vez en el hospital, los médicos le extrajeron un bulto de la garganta. Se trataba de un moneda moneda de tres peniques, que estuvo atascada en su garganta 12 años al lado de sus cuerdas vocales, impidiendo que vibren y emitan sonido alguno. Marie recuperó la voz, y así lo vivió: "Pude sentir el sonido en mi garganta, gemidos, sollozos. Al principio, no sabía de dónde venía ese ruido. Pensé que alguien se estaba metiendo conmigo".
La pregunta que empezó a rondar tras el milagro es cómo que nadie vio esa moneda. Los médicos se excusan en que, al estar en la garganta, no se podía ver mediante una radiografía.
Marie, ahora de 48 años, conserva la moneda. La tiene en una pulsera que utiliza de vez en cuando. Y su historia, también, lejos de quedar enterrada, fue publicada en su libro llamado “Voiceless” (sin voz) en julio de 2019.

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Fuente: TN

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