Política
Pese a la crítica sigue vigente el millonario monto para comprar sin licitación
El intendente Carlos Maza Peze decidió dar marcha atrás con el aumento del 50% que había otorgado para la planta política. De todas formas el incremento del 2.400% que realizó para la compra directa continúa en pie.
Por Mauricio Laciar
Luego de las fuertes críticas que recibió y del malestar social en el departamento, el intendente de Angaco, Carlos Maza Peze decidió dar marcha atrás con el incremento de sueldo del 50% para la planta política. Aunque este retroceso fue a medias, ya que el aumento del 2.400% que había realizado en la posibilidad de comprar sin licitación continúa en pie.
Ni bien asumió la intendencia de Angaco, Maza Peze envió al Concejo Deliberante una ordenanza para incrementarse en un 50% el sueldo y pasar a ganar así cerca de $170 mil mensuales. Al mismo tiempo modificó los montos para compras directas y los aumento 24 veces. Incluso muy por encima de lo que maneja la Provincia y otros municipios.
Conocida la noticia fueron muchos los actores políticos que castigaron la decisión de Maza Peze, situación que luego de varios días lo hizo volver sobre sus pasos y dejar sin efecto la suba salarial. No así la posibilidad de comprar sin licitación buscando mejores precios en beneficio de las finanzas angaqueras.
Con esta ordenanza, que salió con el voto de sus tres ediles, el intendente podrá comprar sin llamar a licitación por una cifra millonaria. El monto para compras directas con carácter general quedó en $1.800.000, la compra de productos alimenticios a $350.000 y para combustible a $2.000.000 por mes. Para tener una idea la diferencia que hay con el Estado Provincial basta decir que los montos son de $60.000, $200.000 y $100.000 respectivamente, según informaron desde el Ministerio de Hacienda y Finanzas.
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La compra directa le ofrece la posibilidad al intendente de adquirir algún bien o servicio de urgencia sin necesidad de esperar los tiempos administrativos que requiere una licitación, pero también la potestad de direccionar las compras. Además en tiempos donde lo económico marca el camino, con el llamado a licitación el Gobierno se garantiza una compulsa entre los oferentes y por lo tanto mejores precios.