El aeródromo de Balad, al norte de Bagdad, fue golpeado con numerosos proyectiles, dejando un saldo de cuatro soldados iraquíes heridos. Ya había sido atacado a comienzos de enero.
Fueron cuatro proyectiles. Dos cayeron en una base aérea que aloja tropas estadounidenses en Balad y otros dos estallaron cerca de la embajada norteamericana en la capital iraquí. No hay reportes de víctimas.