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Los gitanos y su proceso de integración
En una época existieron variadas hipótesis sobre su origen. Actualmente los gitanos están transitando por un proceso de integración. Donde es más perceptible este fenómeno es en el plano laboral.
Por Edmundo Delgado
El origen étnico de los gitanos, junto a la segregación y persecuciones que sufrieron, es la consecuencia de un extenso proceso histórico. En una época existieron variadas hipótesis sobre su origen. Para algunos estudiosos procederían de Egipto, de Asiria, o de Caldea. En 1780 se develó el misterio gracias a los estudios lingüísticos o filológicos, realizados por los alemanes Grellmann y Rudiger y por el inglés Bryant. Ellos descubrieron el origen hindú de las lengua gitana (el romanó o romaní). Se pudo establecer que provendrían de un territorio ubicado en los límites de Irán y la India.
Se desconocen los motivos y la fecha precisa de la diáspora gitana. Se sabe que aparecen en Europa entre los siglos XIV y XV, llegando en lenta progresión las primeras caravanas gitanas conservando lo que todavía hoy son rasgos de su identidad: endogamia, el idioma propio y la inclinación al comercio. A América Española arribaron con los primeros conquistadores y se dispersaron por todo el continente.
En un principio los zíngaros fueron recibidos con simpatía por algunos reyes europeos. Posteriormente quizá debido a sus hábitos de mendicidad, a las acusaciones de practicar brujería y sobre todo al hecho de ser diferentes comenzaron a ser hostigados. Este acoso social hacia los gitanos se transformó en algo constante, llegando a límites insospechados. Las más crueles persecuciones de que fueron objeto se registran en España y Alemania: por ejemplo las emanadas por el Tribunal del Santo Oficio, siglos más tarde por la dictadura de Franco y finalmente con la irrupción del nazismo (en Auschwitz también se les aplicó la llamada solución final).
Con todos estos hechos de segregaciones y acosamientos la historia del pueblo gitano esta imbuida de cierto misterio propio de su cultura milenaria, lo cual ha generado todo un halito de romanticismo sobre sus costumbres tan particulares, por ejemplo adoptaron diversas religiones, no sentaron las bases de una economía permanente, no poseen lengua escrita ni textos iniciadores y para ellos su patria es el mundo.
Actualmente los gitanos están transitando por un proceso de integración, donde es más perceptible este fenómeno es en el plano laboral, abandonando tradicionales ocupaciones, reemplazándolas por otras donde cumplen horario y tienen salario fijo. Sin embargo todavía continúan siendo víctimas de persecuciones: en 1993 un grupo de 50 gitanos fueron deportados desde Berlín hacia Rumania, utilizados como “chivo expiatorio”.