Publicidad

Yo construyo > Retro

El arte de transformar lo viejo en moderno para tu hogar

El término "retro" define una tendencia en decoración, es una palabra  que gana espacio y vuelve a estar de moda cada año, siempre al pie de la innovación, readaptación a los tiempos actuales y mantención del espíritu original.

POR REDACCIÓN

15 de enero de 2019

El mundo de la decoración no se toma tiempo de descanso. De un día para el otro surgen nuevas tendencias dentro de un contexto activo e imparable en el que la inspiración juega un rol fundamental. El diccionario de la Real Academia Española dice que la palabra “retro” proviene del latín y significa “hacia atrás”. Lo curioso de esta tendencia en decoración es que en un ambiente actual puede contar con piezas compradas hoy mismo, pero que parecen sacadas de un catálogo del siglo XX y aún así estar a la moda. Es un arte que no se puede explicar.

Ahora vamos a la palabra Vintage. Derivada del francés vendange, comenzó a usarse para designar prendas u objetos diseñados y fabricados en otra época, y que por su historia, significación, valor estético, funcionalidad o singularidad, trascendieron su tiempo. Y luego pasamos al término Retro. Proviene del latín y significa “hacia atrás”. Es una tendencia actual que imita el estilo o la moda de un tiempo pasado.

Es común confundir el estilo retro con el vintage, sin embargo no son exactamente lo mismo.

Un objeto decorativo es vintage si es de la época en la que fue creado. Todos los objetos representativos de la época en que fueron diseñados o fabricados son vintage. El mobiliario, para que siga siendo de este estilo, no debe estar intervenido en ningún sentido. Básicamente, son elementos originales, que deben estar en excelente estado de conservación. Diferentes son los artículos decorativos retro, que reviven estilos y modas de un pasado reciente, pero son fabricados o creados en la época actual. Simulan la estética del pasado pero en objetos nuevos, con aspecto antiguo, que parecen de otra época.

Publicidad

El estilo que más se emplea en la decoración actual es el retro moderno. Sencillamente porque para acceder a los objetos vintage hay que ser coleccionista o comprar en anticuarios o mercados de pulgas. En cambio, utilizando materiales modernos se puede recrear cualquier objeto o mueble antiguo y darle vida al estilo retro.

Esta tendencia se inspira en los diseños de los años ‘50, ‘60 y ‘70 del siglo pasado para crear un entorno exclusivo y personal. Lo importante en la decoración del estilo retro es la combinación de colores, texturas y materiales, la mezcla de diseños y volúmenes, desde los más simples a los más futuristas.

Dado que la época en la que se basa este estilo abarca un espacio de tiempo muy amplio, hay una gran variedad de formas, texturas y colores que pueden ayudar a crear un ambiente retro.

Con respecto a los colores y estampados, podemos elegir entre una variedad cromática muy amplia. En los años ‘50 y ‘60 se usaban los tonos suaves (verdes, amarillos o azules) y los contrastes, combinando el rojo, el amarillo mostaza y el blanco con el negro. En los años ‘70 triunfaron los colores chillones y brillantes, como el fucsia, el naranja butano o el verde lima.

Publicidad

No obstante, hay algunas combinaciones de colores muy características de esta época, sobre todo las creadas con negro, blanco y rojo (blanco-negro, rojo-negro, rojo-blanco-negro). Otras combinaciones típicas en este estilo son el marrón-marfil y el turquesa-fucsia.

Los estampados también son propios de este estilo, así como las formas geométricas.

Sobre las formas retros, las formas geométricas siempre están en esta tendencia decorativa. Formas cuadradas y triangulares aportan dimensión y estructura a los tejidos. Los estampados florales no están del todo excluidos, aunque para recurrir a ellos se debe seleccionar los que se adapten a la gama de colores elegida. En el mobiliario destacan las formas curvilíneas, los diseños abstractos y los complementos circulares.

Referente a los materiales y texturas, destacan los materiales metálicos, como el aluminio; y los plásticos, como el acrílico y el polipropileno, propios de los años ‘50. El vinilo y el cuero también son distintivos de la decoración retro, pero lo más característico es la combinación de los materiales en un mismo elemento, como las sillas de cuero con patas de aluminio, características de la época. El vidrio y el cristal también juegan un papel importante, sobre todo en los complementos, principalmente el cristal de murano. El terciopelo y el peluche son las texturas más populares.

A su vez, con respecto a lo mobiliario utilizado, las líneas retro de los muebles con acabados modernos tienen formas curvilíneas y circulares, que son características de los muebles clásicos retro. Emparejados éstos con cuero moderno, madera y muebles de acabado lacado, se logrará un resultado estupendo. Para darle un toque retro a una habitación basta con incluir un par de muebles típicos de la época: una mesa redonda con pie tulipa; un puff de vinilo, cuero o terciopelo de color brillante; un sofá de estampado animal o multicolor; una silla de plástico de formas redondeadas y futuristas; unos taburetes cromados o de polipropileno de colores chillones para la cocina.

Características de los muebles de estilo Retro

Muebles y objetos inspirados en las años ‘50, ‘60 y ‘70, retorno de los diseños del pasado. Es una combinación entre lo nuevo y lo viejo.

Las patas de los sofás y mesas suelen ser delgadas y generalmente cilíndricas. Bordes redondos

Los sofás son amplios.

Las lámparas son generalmente en forma de bola.

Combinación de texturas, colores y materiales.

Colores como los marrones, el marfil, ocres, mostazas y naranjas. Predominan los tonos pasteles.

Materiales como la madera, metal y plástico. También la pana y los materiales sintéticos, en formas geométricas como círculos y rectángulos en los estampados.

Complementos retro. El vidrio y el cristal son los materiales más acertados para conseguir un estilo retro. Una bandeja de cristal de murano o unos jarrones de vidrio de fuertes colores y diseño sencillo son buenas opciones. Con estos objetos se puede decorar la mesa de la sala o el dormitorio.

Para cubrir el piso se puede elegir alfombras de pelo o alguna un poco extravagante. Las formas geométricas también son una buena opción.

Si se prefiere un estilo retro total, habrá que poner una moqueta estampada en el suelo o cubrirla con baldosas de dos colores, formando un tablero de ajedrez.

Nunca hay que olvidar que aunque el estilo retro se base en una mezcla de colores y materiales, es importante seguir un patrón para conseguir que todos los elementos encajen dentro del ambiente. A la hora de decorar hay que regirse por la gama de colores, por la forma, por el diseño, o por la tendencia de una década en particular, procurando no saturar demasiado las habitaciones y seleccionando aquellos objetos retro que más nos gusten e identifiquen, sin recargar el espacio.

Luego de conocer las características de este estilo, podemos llegar a afirmar que cuando nos referimos a un objeto como retro lo que queremos decir es que hay algo en él que evoca tiempos pasados, bien sea porque el objeto en sí fue creado entonces o porque, aun siendo nuevo, utiliza la estética de otra época,

    Publicidad
    Más Leídas
    Publicidad

    ÚLTIMAS NOTICIAS