Provinciales > Pedido de ayuda
El drama de la familia Flores, a punto de quedarse en la calle
Paola y Fabricio, de 24 años, y su hijito Walter, de 5, siguen sin un lugar donde vivir.
POR REDACCIÓN
Paola y Fabricio parece todavía no tropezar con la suerte. A más de una semana de la publicación de su desesperado pedido de ayuda, la solución todavía no llega. Sin embargo, atisbos de esperanza aparecen en su camino de a poco con la fe de que llegará, en cualquier momento, algo mejor. “Fabricio consiguió trabajo en un taller metalúrgico acá en Albardón y con eso esperamos hacer algo”, cuenta Paola algo resignada.
El pasado 7 de noviembre, DIARIO HUARPE publicó en su edición digital y papel la historia de Paola y Fabricio, de 24 años, que junto a su pequeño hijo Walter, de 5, viven en una casa prestada de adobe sin puertas ni ventanas, ni luz ni gas, en la calle Lozano al sur de calle España, en Albardón.
Hace poco recibieron la noticia de que deben desalojar porque una de las dueñas de ese terreno quiere derrumbar esa casa. Desesperados, Paola y Fabricio se pusieron manos a la obra para tratar de solucionar la situación antes de quedarse con el pequeño Walter en la calle. Pero aún no han tenido suerte.
“Desde el municipio me ofrecieron materiales de construcción, pero no podemos recibirlos porque no tenemos dónde construir ni dejarlos. No tiene sentido”, cuenta Paola, que no recibe ayuda ni cobijo por parte de su familia, ni la de Fabricio. Para colmo, a esto se suma el hecho de que la Dirección de la Niñez quiere quitarle al pequeño Walter, ya que no pueden vivir con él en esas condiciones.
“No me lo han quitado todavía porque tengo la ‘carpeta’ (vacunas, peso, alimentación) al día. Pero estamos hartos de vivir de esta manera y no quiero que mi hijo crezca así”, relata angustiada Paola. También pidieron un refugio en las denominadas “casas de urgencia”, pero tampoco tuvieron respuesta.
Desde la publicación de su historia ha recibido mensajes de apoyo y donaciones, pero no la solución que está buscando. “La gente ha sido muy solidaria y les doy las gracias a todos por los mensajes de fuerza, las donaciones y el apoyo”, dice. Esos mensajes parecieron traducirse en un empujoncito de suerte, ya que Fabricio logró conseguir trabajo en un taller metalúrgico. Pero no se confían ni echan en la comodidad: siguen buscando una casa digna para vivir.
Ahora, buscan mejorar un poco su situación hasta conseguir un nuevo lugar donde instalarse. “Pedimos si alguien tiene una garrafa. No puedo cocinar bien con leña de algarrobo. También unas luces recargables para prestarnos porque vivimos en la oscuridad con velas. Estamos buscando una cama grande. Colchones tenemos. No importa si está rota o vieja, nosotros la arreglamos”, pide con fe a los sanjuaninos.
Además, reiteran su pedido de un lugar donde puedan trabajar y vivir como serenos o encargados de propiedad. “Estamos buscando un lugar donde podamos vivir y trabajar: una finca, una casa, un lugar. Nosotros la cuidamos y nos hacemos cargo de la propiedad mientras vivamos ahí”, cierra.
Para comunicarse con ellos y enviar donaciones, llamar al 2645239512 (Paola) o al 2646303808 (Fabricio).