Provinciales > Historias sanjuaninas
La nueva vida de Santiago, un sanjuanino que tras vivir cuatro años en la calle volvió a dormir bajo techo
Recibió ayuda de un joven que lo impulsa a que salga adelante y a que termine la escuela.
Por Eliana Ruiz
Un cambio radical fue el que tuvo la vida de Santiago en apenas unos días. Después de dormir cuatro años en la calle, pasó la noche del 12 de mayo bajo techo y en la mañana de este miércoles se presentó a su primer día de trabajo. Todo esto pasó gracias a Maximiliano Avendaño, el propietario de un bar que le brindaba el desayuno y el almuerzo al joven. Con el tiempo comenzaron a hacerse amigos y él decidió brindarle ayuda para que saliera adelante.
Santiago tiene 18 años y está en situación de calle desde los 14. No tiene celular así que no tiene contacto con sus padres que viven en Buenos Aires. Poco menciona de su vida pasada, habla con timidez, como pidiendo permiso para hacerlo y cuando un desconocido se le acerca su primera reacción es la de mostrar el DNI.
A pesar de su corta edad ya pasó por varias provincias tratando de encontrar trabajo. Estuvo en Mendoza donde durmió en la puerta del Correo Argentino y en San Luis donde trabajó mañana y tarde en la cosecha de aceitunas por $100 y sanguches, el único alimento que comía en el día.
Con el pasar del tiempo volvió a San Juan. Seguía sin un techo así que dormía en la plaza Hipólito Yrigoyen, más conocida como La Joroba. Durante el día solía deambular por el centro por lo que una amiga de Maximiliano, que es asistente social del Hospital Doctor Guillermo Rawson, Victoria Esteso, los presentó. Además, le preguntó si el joven en situación de calle podía desayunar diariamente en el bar para que tenga al menos una comida en la panza. Después, también comenzaron a brindarle el almuerzo. De esa forma Santiago y Maximiliano fueron entablando una amistad y el propietario del local fue conociendo la sufrida vida de su amigo.
Con el correr de los días, conoció que Santiago está cursando tercer grado del Nivel Primario en la escuela Antonio Torres y que tiene muchas ganas de terminar la escuela y de trabajar. Fue así que decidió ayudarlo, lo llevó a la peluquería, le prestó su hogar para que se bañara y le pagó la habitación de un hotel céntrico para que durmiera bajo techo. Por primera vez en cuatro años, Santiago no durmió en la calle.
Decidió abrir una cuenta de Instagram para contar lo que estaba pasando y además difundir el CBU de una cuenta de Mercado Pago que le abrió para que los sanjuaninos que desean ayudar hagan su aporte económico. A través de ese lugar va a difundir los tickets de los gastos que tengan para que sepan que el dinero está siendo utilizando para ayudar al joven.
En menos de 48 horas los mensajes que le llegaron a través de la red social fueron muchísimos, como así también, las donaciones de ropa. Las publicaciones llegaron hasta el Municipio de Capital y desde la Dirección de Empleo le ofrecieron un trabajo al cual comenzó a asistir este miércoles. “La condición del trabajo es que siga yendo a la escuela y al gabinete en el que lo atienden psicólogas y una asistente social”, explicó Maximiliano.
Pero no quieren que la ayuda quede ahí. Maximiliano y Victoria ya comenzaron a buscarle un departamento para que pueda vivir y están viendo si el municipio puede aportar para este alquiler que mejorará la calidad de vida de Santiago.
Mientras tanto, el propietario del bar es como su tutor. Lo lleva a desayunar, al trabajo, a la escuela, lo despierta día a día para que vaya al área de Empleo y hasta está en contacto con el gabinete de profesionales que lo asiste.
“Queremos ayudarlo porque en la calle hay gente que lo está aconsejando mal, pero él va a seguir yendo al psicólogo porque esto es un montón, fue todo muy rápido. La idea es empoderarlo durante varios meses, acompañarlo para que él después empiece a trabajar y se pueda manejar por sus propios medios”, contó.
Sabe que en un futuro deberá seguir con sus cosas cotidianas, pero por el momento está dedicado a Santiago, quiere que salga adelante y tenga una mejor calidad de vida y está poniendo todos sus esfuerzos en ello. Esto ya se lo explicó a su amigo quien realiza la mayoría de sus acciones con timidez y se limita a responder con sí o con no la mayoría de las preguntas. Sólo con Maximiliano amplía sus respuestas y las palabras.
“Es la primera vez que hago esto de forma tan cercana a la otra persona, siempre hay gestos solidarios para ayudar a personas en la calle, pero esta vez está siendo distinto. Esperemos que esto sea un trampolín para que muchos otros Maxis ayuden a otros Santiagos”, cerró el joven.
Para ayudar: https://www.instagram.com/santinavarrosj/