La demanda de carne vacuna registra cifras históricamente bajas en Argentina. A pesar del aumento en la producción y las exportaciones, el consumo interno continúa desplomándose debido a factores económicos que afectan los hábitos alimenticios.

El desplome de las ventas en las carnicerías solo afecta a la carne vacuna, mientras que el cerdo y los embutidos tuvieron un repunte con respecto a meses anteriores. Sin embargo, en la comparación interanual sigue en baja.

La baja de precios en la carne vacuna no logró compensar la brutal caída del consumo que, en peso, representa más de 8 kilos por persona. La cifra es la peor en los últimos 30 años.

La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Agroindustria tiene previsto implementar un programa de capacitaciones sobre producción porcinas en escuelas agrotécnicas de San Juan.

Pese a que se desaceleraron las subas en distintos productos, la carne no para de aumentar y aseguran que en San Juan los incrementos rondan el 5% cada semana. A su vez, advierten que el consumo cayó en promedio en un 25%, y cada vez son más las carnicerías que cierran sus puertas.

En total son cuatro los chacinados incluidos en el convenio.