Huarpe Deportivo
Tres dirigentes de San Lorenzo fueron procesados por la justicia
El magistrado Manuel De Campos tomó la medida por los presuntos delitos de facilitación de formación de grupos destinados a cometer homicidios y administración fraudulenta.
POR REDACCIÓN
El jefe de Seguridad de San Lorenzo, el intendente del estadio y un empleado fueron procesados por la Justicia por haberle vendido de manera ilegal 350 entradas a una facción de la barrabrava de Boca, horas antes del partido amistoso que ambos equipos iban a jugar en julio del año pasado y que no se realizó por el asesinato de dos hinchas.
Fuentes judiciales informaron que el juez de instrucción Manuel De Campos procesó a Rubén Martínez, Alejandro Maccio, y a Jorge Daniel Goncalves Machado por los delitos de facilitación de formación de grupos destinados a cometer homicidios y lesiones y administración fraudulenta.
El magistrado sostuvo en su resolución que San Lorenzo se había comprometido a no comercializar tickets el día del encuentro y que la entrega de las entradas permitió “la formación de uno de los grupos de la barrabrava de Boca que confluyeron ese día” y que derivó en un enfrentamiento a los tiros con el sector oficial que terminó con los crímenes de Marcelo Carnevale y Ángel Díaz.
El hecho ocurrió el 21 de julio del año pasado horas antes del amistoso que iban a jugar San Lorenzo y Boca en el estadio “Nuevo Gasómetro”. Para el cotejo se había realizado una venta anticipada de entradas y Maccio firmó un acta con la Policía Federal y el Ministerio de Seguridad a través de la cual se fijó la cantidad de accesos para el visitante: 3500 populares y 1500 plateas, “con la prohibición de las ventas de las mismas en el estadio el día del espectáculo”.
Sin embargo, en los medios de prensa se informó que el “Ciclón” iba a ofrecer entradas en el estadio y el propio Goncalves Machado reconoció en su indagatoria que el jefe de la barra de San Lorenzo, Christian Ariel Evangelista, le presentó a dos hinchas de Boca que querían comprar entradas.
El propio “Sando” confirmó en su declaración que hizo la presentación pero que no podía reconocer a los hinchas “xeneizes”, de quien sólo dijo que uno se llamaba Cristian y que lo conocía de una murga del barrio de Barracas.
Goncalves Machado declaró que le entregó las 350 entradas a los simpatizantes boquenses y que recibió 21 mil pesos que dejó en la caja fuerte de la tesorería del club. Por su parte, Maccio y Martínez, como dirigentes del club, autorizaron la venta de las entradas a pesar que el primero había firmado el acta que lo prohibía y señalaron que fue la Policía quien los avaló a hacerlo.
La sospecha es que los tickets terminaron en manos de la facción de la barra de Rafael Di Zeo, quien tenía la intención de volver a los estadios a disputarle el liderazgo a la barra oficial, que
dirigía Mauro Martín. Ambos sectores se encontraron en las cercanías y se enfrentaron a tiros, hecho en el que fueron asesinados Carnevale y Díaz y que derivó en la suspensión del partido.
De Campos detalló que “una de las entradas comercializadas irregularmente fue encontrada entre las pertenencias de Ángel Díaz”. “Goncalves Machado al vincularse con los hinchas de Boca, violando expresamente la medida de seguridad facilitó la formación de grupos fuera del estadio de San Lorenzo”, sostuvo el juez.