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La sanjuanina que se hizo su propia casa y ahora aprendió a construir con hierro y telgopor

Entró a ese mundo a los 19 años en medio de la desesperación de no conseguir trabajo. Ahora, tiene 35 y es la presidenta de una cooperativa.

24 de febrero de 2021

Corría el año 2004, Sandra Guardia tenía 19 años, cursaba el embarazo de su primer hijo y estaba desesperada porque no encontraba trabajo. Ese año Nación lanzó un programa para formar cooperativas a través de los municipios. Ella junto a un grupo de vecinos de la villa 11 de Noviembre, en Rawson, averiguaron, se capacitaron y finalmente formaron la cooperativa Tres soles que actualmente preside.

“A mí no me des plancha ni cocina, a mi dame pico y pala”, dice entre risas.

Foto: Gonzalo Medina / DIARIO HUARPE.

Cuando el grupo se formó, ella y sus vecinos comenzaron a hacer cursos y capacitaciones de la UOCRA. Ese mismo año el municipio en convenio con el IPV los contrató para que construyeran un barrio. Hicieron 24 viviendas, en una de ellas vive Sandra actualmente.

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“Embarazada y todo con mi marido y los demás integrantes de la cooperativa construimos nuestras propias casas”, cuenta.

Actualmente, es la presidenta de Tres soles que está conformada por 12 personas en total. Entre ellas hay personas con discapacidad, mayores y mujeres que fueron víctimas de violencia de género. “Desde el 2004 están los mismos vecinos, de mi cooperativa nunca se fue nadie”, asegura.

A fines de noviembre del 2020 el grupo se capacitó en una nueva técnica: construcción con placas de telgopor contenidas en mallas de hierro. El curso lo lanzó la Dirección de la Mujer en conjunto con la Dirección de Cooperativas con el fin de brindar innovadoras herramientas de trabajo.

“Para mí fue algo totalmente nuevo porque siempre usábamos cemento, arena y ladrillo. Fue algo novedoso, en algunos lados se está viendo, pero nosotros no lo teníamos incorporado. Lo bueno es que es un material muy fácil de trabajar porque es armar, poner y nada más”, comenta.

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Las primeras clases las recibieron a través de Zoom. Después visitaron algunas obras de barrios construidos con esos materiales y ahora les faltan los pasos finales: construir una casa piloto y un merendero. Esas obras aún no empiezan porque están esperando que llegue el material desde la provincia de La Rioja.

Quienes hicieron el curso realizaron visitas a obras construidas con esa técnica. Foto: gentileza.

Según cuenta Sandra, con estas placas se pueden hacer bancos para plazas, macetas,  casas, consultorios, cierres perimetrales, mesas y mucho más. Tienen varios beneficios: son antisísmicas, hay un abaratamiento de costos, que es de alrededor de un 30% menos que el de una construcción tradicional, y la rapidez, por ejemplo, una casa de una habitación, cocina, comedor y baño, se hace en 30 días aproximadamente.

Esta capacitación, además de bridarles nuevos conocimientos, les permitió ocuparse en medio de la pandemia de coronavirus, tiempo en el que no consiguieron trabajo. Incluso, aún no lo consiguen así los integrantes ya no saben qué hacer.

“Estamos sobreviviendo con changas el día a día. La hemos pasado mal y seguimos así todavía”, dice Sandra.

Agrega: “De este trabajo dependen muchas familias y ya llevamos un año sin trabajo. Estamos todos los días esperando que salga algo, llevamos proyectos a los municipios, nos ofrecemos, pero no aparece nada”.

En su caso, ella, sus hijos de 9, 5 y 17 años están viviendo con las ganancias que obtiene su esposo con las changas que realiza a diario.

Es por ello que desde la cooperativa se ofrecen para hacer trabajos de construcción. Entre las obras que hicieron hay cunetas, cordones, banquina, cloacas, casas, colocación de cerámicos, entre otras. Para hacer esto están inscriptos en la Dirección de Cooperativas y en el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social.

Foto: Gonzalo Medina / DIARIO HUARPE.

“Llevar una cooperativa adelante no es fácil, a veces se nos terminan los contratos y no podemos continuar”, admite la mujer.

Sandra admite que nunca pensó que podía estar en el ámbito de la construcción. Hasta que probó y se enamoró de la experiencia. “Es hermoso, son aprendizajes que no se olvida y que una le transmite a sus hijos”, cierra.

Para contratarlos: 2645407069

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