Publicidad

Departamentales > 20 de junio

Pocito armó su desfile patrio para festejar el Día de la Bandera

Para que la fecha no pasara desapercibida, las agrupaciones gauchas del departamento organizaron su propia actividad.

20 de junio de 2022
Los gauchos se lucieron en el desfile. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.
Los niños estuvieron presentes. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.
Los adultos fueron apludidos por la concurrencia. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.
Los colores patrios, en lo más alto. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.
La insignia nacional engalanó el paso de los que desfilaban. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.

A falta de su acto de gobierno, Pocito se gestionó su propia celebración. Es que este lunes 20 de junio, las agrupaciones gauchas se dieron cita en Boulevard San Martín junto a escuelas de danza y deportivas para honrar la memoria del General Manuel Belgrano. El festejo fue atípico y tuvo todo lo necesario para ser memorable.

Eran las 13 y, a medida que se venían acercando al Boulevard de la Estación San Martín, la fila de autos que se estacionan por la calle Aberastain, entre 13 y 14, se empezaba a notar. Los árboles, naranjas y secos, arman una alfombra de bienvenida. El olor a parrillada acompañaba el momento.

Publicidad

Las familias, en su mayoría pocitanas, avanzaban por el Boulevard. Llevan mesas, termos y banquetas de plástico. El cielo estuvo limpio: azul y algunas nubes blancas terminaban de darle el toque místico y patriótico. Ese cuentito de primaria de que la bandera está en el cielo es verosímil esta vez.

No hay guardapolvos. En vez de eso, hay casacas amarillas y negras, colores del Club Atenas. Es que la tradicional promesa de los alumnos de cuarto año se cambió por el desfile gaucho. Son ellos los que al enterarse de que no habría un desfile provincial, gestionaron en su municipio un festejo para que la fecha no pasara desapercibida.

Los niños estuvieron presentes. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.

El desfile estaba enmarcado por las paredes de adobe de las casas. En el fondo de la calle se veía la precordillera. En la vieja estación dispusieron el palco de autoridades y unos mesones en donde disfrutan de las tradicionales sopaipillas. En un costado, las agrupaciones gauchas se disponen junto a sus caballos.

Los jinetes alzaron la voz y dieron órdenes de comenzar. Los representantes de cada agrupación se reunieron para determinar los lugares de salida. Encabezaba la organización de La Rinconada. El desfile marcó el inicio.   

Publicidad

Y los libres del mundo responden

Estuvo presente la banda militar del RIM 22 El Tambolar. El verde de sus uniformes contrastó con la tierra suelta del lugar. Tocan el himno, al principio, quienes cantaban lo hacían de manera tímida, pero a medida que avanzaron las estrofas, el volumen subió. El sentimiento patrio a flor de piel.

La banda seguía tocando. El recorrido era corto, aunque las veredas estaban colmadas de gente. Encabezan el desfile los chicos del club Atenas, cada uno con sus casacas    portaban la bandera del club. La gente alentaba con euforia. En la postal se colaron algunas mamás, que indicaban que su hijo o hija mire a la cámara para sacarle la foto con el celular. Detrás vinieron los adultos mayores deportistas mientras el presentador decía: “Un ejemplo que demuestra que no la edad es un límite”.

Los adultos fueron apludidos por la concurrencia. Foto: Mariano Martín / DIARIO HUARPE.

Luego siguió la escuela municipal de Pocito de danzas tradicionales con sus pañuelos y trenzas. Le continuaron cuatro agrupaciones gauchas y de entre los que iban montados estaba Don Pedro, que portaba la bandera.

Cuando avanzaron por la calle la genta aplaudió y vitoreó a cada uno de los integrantes. Hay algo de esa cara oscurecida y rota por el sol que impuso su presencia. Algunos aprovechaban y sacaban el celular para filmarlo, mientras que a otros se les escapaba un ¡Viva la Patria! El ícono del gaucho portando la bandera conmovió a los presentes.

La escuela de ciclismo departamental cerró el encuentro. Sus cuerpos brillaron por la tela deportiva de sus trajes. Los primeros fueron los niños y luego los adolescentes. Al finalizar hubo espectáculos musicales y números de danza. El mismo boulevard que fue sede del desfile se convirtió en feria.

Así, con unos pocos ingredientes, se cocinó una fecha patria. Después de dos años de interrupción por la pandemia de Covid-19, los gauchos y los pocitanos fueron quienes tomaron la posta para mantener el espíritu patrio.

    Publicidad
    Más Leídas
    Más Leídas
    Publicidad

    ÚLTIMAS NOTICIAS