Asesinato del policía: Fiscalía recibirá esta semana los resultados de pericias clave sobre el crimen

En medio de la investigación para determinar las causales que llevaron al crimen del policía sanjuanino Oscar Mura, de 28 años, la Fiscalía espera recibir esta semana los resultados de pericias clave para desentrañar cómo fueron los hechos. Fuentes judiciales aseguraron que arribará a San Juan el informe del barrido electrónico que se envió a un laboratorio mendocino para que lo examinaran con una técnica especial y también las conclusiones respecto de las esposas que tenía puesta el presunto asesino y novio de la víctima, Diego Espejo.

Estos resultados serán determinantes para saber, a ciencia cierta, qué ocurrió en el interior de la vivienda del barrio Sarmiento, departamento Chimbas, durante la madrugada del viernes 19 de marzo. Ese lugar estaba siendo alquilado por la pareja desde el mes de octubre, pero esa noche se convirtió en un escenario de tragedia, caos y sangre.

Mura fue encontrado sin vida en el suelo de la habitación. El efectivo fue acribillado de cuatro disparos: tres en la zona del abdomen y uno en la espalda, de acuerdo a lo que constató el médico forense. En cuanto al último disparo en la parte trasera del cuerpo, la Fiscalía entiende que el asesino terminó de rematarlo.

Por su parte, Espejo, el único acusado en la causa, estaba semidesnudo y con las esposas que el efectivo ocupaba para cumplir con su tarea diaria entre sus manos. Testigos aseguraron que el hombre decía: “No lo maté, él sigue vivo”. Matías Rossini, vecino e hijo de la propietaria del arrendamiento, lo contuvo en el fondo de la vivienda debido a que estaba alterado.

Espejo se sentó frente al juez Matías Parrón el pasado viernes 26 de marzo. El hombre estaba conectado vía online desde el interior de la Comisaría 27º debido a que transita por un cuadro de coronavirus  que lo obligó a confinarse tras las rejas. Allí contó la versión de los hechos, aunque no explicó cómo llegaron las esposas hasta sus muñecas.

Preliminarmente se cree que la pareja llegó a la vivienda minutos antes de la 3 de la madrugada. Habían estado compartiendo algunas bebidas en el bar céntrico Molly Molene y estiman que luego se inició una discusión y fue ahí cuando Mura le colocó las esposas. Sin embargo, la Fiscalía puso en duda esta versión y no descarta que el implicado se las colocara una vez cometido el hecho. De la causa judicial se desprende que el hombre salió de la vivienda con las esposas puestas. Así fue visto por Rossini debido a que Espejo le dijo: “Ayudame Matías, mirá como me tiene”.

El barrido también será clave para saber otras circunstancias de la escena del asesinato. El presunto criminal utilizó el arma reglamentaria de Mura. Con esa pistola 9 milímetros se piensa que efectuó los disparos. Sobre la cama había cuatro vainas servidas y una bala en el suelo. El arma reposaba sobre la mesa de la cocina y la corredera estaba trabada.