Cultura y Espectáculos
UNSJ, el hogar de las formas
Un grupo de docentes junto con alumnos de distintas carreras de la Universidad Nacional está trabajando para rescatar obras de un importante artista sanjuanino. Por Berenice Llopis Rescatar, restaurar y exhibir a todo público obras de sanjuaninos es la actividad que convoca a docentes y alumnos en la Facultad de Arquitectura. Se trata
POR REDACCIÓN
Un grupo de docentes junto con alumnos de distintas carreras de la Universidad Nacional está trabajando para rescatar obras de un importante artista sanjuanino.
Por Berenice Llopis
Rescatar, restaurar y exhibir a todo público obras de sanjuaninos es la actividad que convoca a docentes y alumnos en la Facultad de Arquitectura. Se trata de un departamento de investigación ubicado al lado de la biblioteca de esa facultad, que a través de un amplio vidriado invita a los curiosos a acercarse y conocer más sobre el fantástico mundo de las formas de Carrieri.
Su historia
José Carrieri es un reconocido artista local. Ente otros, es el autor del Monumento al Deporte (emplazado en el Parque de Mayo), inaugurado en 1970 con motivo del XIX Campeonato de Hockey. Además se desempeñó como docente en la casa de altos estudios en donde junto con sus alumnos produjo innumerable cantidad de obras. “Durante un periodo político complicado fueron los mismos colegas de Carrieri quienes se encargaron de sacar estas piezas de la Universidad y de mantenerlas ocultas para preservarlas”, explicó el arquitecto Iván Martínez, uno de los protagonistas de este espacio.
“En el 2007 se presenta un proyecto en el que se reconocía a la colección Carrieri como parte del patrimonio universitario. Gran parte de las piezas estaba guardada acá pero había que sacarlas y restaurarlas. Hilda Velardi fue la primera impulsora, pero luego tomaron la posta Miguel Baseggio con Nancy Pontoriero que son los actuales encargados del espacio”, continuó Martínez.
Su presente
La colección está integrada por más de 140 piezas producidas entre 1956 y 1972, tanto por Carrieri como por sus alumnos. A pesar de tener un amplio salón, el espacio no les alcanza y se enfrentan con dificultades para poder continuar con el reacondicionamiento de decenas de trabajos que aún se encuentran guardados. En la actualidad, muchos de los que hoy están en formación han decidido tomar esta inmensa colección como inspiración para sus propias creaciones. Incluso la tridimensionalidad de las esculturas se transformaron en una imagen plana en gigantes fotografías y dibujos.
El objetivo
La idea, por ahora, no es montar una megamuestra, ya que de por sí quienes puedan acercarse hasta este luminoso lugar se encontrarán con las figuras expuestas (está abierto en los mismos horarios que la Facultad, y la entrada es gratuita).
Volver a dar vida a estas obras era casi una necesidad de la democracia. Plagadas de formas, y en distintos materiales, las obras ya descansan a la luz y a la espera de aquellos que saben apreciar la producción de otros tiempos.