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Provinciales

Empresarios acusados de incumplir la cuarentena: 2 condenados y 2 con procesos pendientes

Los denunciaron por obligar a trabajar a escondidas a empleados en el medio de la cuarentena.

POR REDACCIÓN

16 de abril de 2020

Flagrancia acaparó todas las miradas este jueves cuando desfilaron por allí conocidos empresarios del rubro textil acusados de hacer trabajar ilegalmente a sus empleados en medio de la cuarentena dispuesta para prevenir el coronavirus.

Gabriel Brant y Jorge Zukerman fueron condenados a 8 meses de prisión en suspenso y el pago de costas y el primero, además, tendrá que donar $40 mil al Hospital Rawson.

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Mientras que Sergio Vallejo Mini dilató las cosas hasta la semana próxima y Ángel Zoberman será sometido a la Justicia penal ordinaria.

Todo comenzó el martes de esta semana, cuando la policía allanó una serie de comercios y depósitos a raíz de denuncias anónimas y del gremio SEC (Sindicato Empleados de Comercio). Los efectivos se toparon con operarios que estaban trabajando a escondidas por orden de los encargados y los dueños, violando así la medida dictada por el presidente de la Nación y el gobernador de la provincia para controlar el avance de la Covid-19.

En el operativo resultaron detenidos Brant, que el propietario de Maxi Brant; Zukerman, supervisor de las firmas las Tres B y Número 1, y el propietario de la casa de indumentaria Zonda Safety Gear , Vallejo Mini. Los tres quedaron con prisión domiciliaria, a la espera del juicio en Flagrancia.

El primero en ser llevado al banquillo de los acusados fue Brant, imputado por violar las medidas adoptadas para impedir la propagación de la pandemia (artículo 205 del Código Penal) y resistencia a la autoridad (239). Finalmente, acordó con el fiscal del caso una condena de 8 meses en suspenso, pagar $10 mil en concepto de costas o gastos del juicio y donar insumos médicos al principal centro de salud que tiene la provincia por un valor equivalente a  $40 mil.

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Luego fue el turno de la audiencia contra Zukerman, acusado de los mismos delitos. El imputado aceptó el pedido del Ministerio Público y en juicio abreviado fue castigado con 8 meses de prisión condicional, cumplir tareas comunitarias por 2 meses en la Municipalidad de Rawson y $5o mil de costas.

El tercero en comparecer no llegó a un acuerdo con el fiscal y la semana que viene irá al debate final. Se trata de Vallejo Mini, quien insistió en que su empresa está exceptuada de la cuarentena y que no cometió ninguno de los delitos en juego.

El dueño de Zonda se expone ahora a una pretensión de pena mayor por parte del Ministerio Público. No obstante, el procedimiento de Flagrancia reza que tiene tiempo hasta minutos antes de la audiencia final para llegar a un acuerdo similar al de sus colegas.

Sea como sea, ninguno de los tres puede ir a prisión en forma efectiva. Primero, porque los delitos que cometieron son excarcelables. Segundo, porque no tienen antecedentes y no hay pruebas de que el martes hayan perpetrado otro hecho que sí tenga una pena que los lleve al Penal de Chimbas.

El otro empresario bajo la lupa es Zoberman, el dueño de las Tres B y Número 1. Como el martes no pudo ser arrestado, su caso se resolverá en el fuero Correccional. También está acusado de infringir los artículos 205 y 239 del Código Penal y la causa penal en su contra se llevará a cabo bajo el procedimiento tradicional, que supone bastante más tiempo que un juicio express como el de Flagrancia.

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