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Provinciales > reclamo del sector

Funerarios sanjuaninos en alerta: piden ser vacunados para no llegar al colapso

Los empresarios explican que son el último eslabón de la cadena sanitaria y que deben lidiar con fallecidos con Covid y contactos estrechos.

14 de abril de 2021

Entre los sectores que se han visto afectados por la pandemia está también el de las empresas y trabajadores funerarios. En San Juan aseguran que tienen personal reducido, más trabajo, protocolos que hacen todo más complejo, son parte de la cadena sanitaria y, a pesar de esto, no han sido convocados para vacunarse.

En el país hubo reclamos recientes del sindicato que agrupa a los trabajadores funerarios y hasta una amenaza de medidas de fuerza. Pero en la provincia, más que temer un paro, los empresarios están preocupados por cómo los afectará la segunda ola y el actual aumento de casos.

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“El año pasado veíamos cómo colapsaban las funerarias en Europa, no entendíamos por qué y ahora sabemos qué pasó: la falta de personal es lo más grave”, explicó Edgardo Maffu, apoderado de Cochería San Juan, a DIARIO HUARPE. Por eso la insistencia en la inmunización, ya que quieren que haya menos riesgo de contagio entre los trabajadores y que en caso de que alguno se enferme lo haga con un cuadro menos grave.

Maffu calculó que son alrededor de 200 los que están en mayor riesgo y por lo tanto los que podrían vacunarse. Se trata de quienes realizan las tareas de retirar y preparar los cadáveres, pero también los trabajadores de sala y quienes reciben a los deudos para los trámites. Estos últimos debido a que son quienes están en contacto con familiares que pueden ser contacto estrecho con casos de Covid.

En la actualidad tienen más trabajo y menos personal. Un porcentaje de los empleados se encuentra con licencia por ser personal de riesgo. “A ellos les seguimos pagando el sueldo y no tenemos posibilidad de contratar más”, explicó el empresario.

Como el proceso se ha complejizado, Muff explicó que se ha vuelto imposible tomar gente y formarla en dos meses para que puedan cumplir todos los protocolos que ya existían y los nuevos. Cada trabajador que todavía está activo es un recurso limitado y no reemplazable y por eso las vacunas se han vuelto una prioridad.

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“Si yo pudiera comprarlas las iría a comprar, pero estamos a disposición de Salud y por eso lo que queremos es al menos una comunicación oficial, saber una estimación de cuándo podrían vacunarlos, porque además los trabajadores están ansiosos y no sabemos cómo decirles que tengan paciencia”, explicó.

Han tenido contagios entre los funerarios. En lo que va de la pandemia Maffu calculó que un 20% de los empleados estuvo enfermo en algún momento. “Por suerte no hemos tenido fallecidos”, contó.

Tuvieron también el azar a su favor cuando no subieron los contagios internos en octubre y noviembre, que fue cuando San Juan tuvo el pico de contagios y fallecidos. En ese momento, explicó, redoblaron el trabajo y hasta les pidieron acelerar el proceso de retirar fallecidos de las morgues hospitalarias. Hoy la provincia está rondando superando los 200 casos diarios y en ese momento rondaron los 450 en el peor momento.

El retiro de cuerpos, más lento y difícil

Si en condiciones normales la falta de personal es complicada para cualquier empresa, hoy los funerarios se enfrentan a tener que trabajar más y con menos gente. Es que cumplen con un extenso y complejo protocolo de trabajo que hace que el retiro de un cuerpo haya pasado de 30 minutos a tres horas o un poco más.

Quienes tienen que ir a buscar los restos de un fallecido a un hospital, geriátrico o vivienda lo hacen con dos capas de Elementos de Protección Personal. La primera mitad del trabajo, retirar y cargar en el vehículo el cuerpo, se hace con la misma capa externa. Luego se retiran la mitad de los EPP, en un proceso que es de riesgo de contagio por lo tanto es lento para que sea cuidadoso, se colocan una segunda capa y comienzan la desinfección de los ambientes.

Todos los lugares por los que se trasladó el cadáver, incluido el vehículo, lo deben limpiar las mismas dos personas que se encargan del retiro y manipulación. Esto es para no comprometer a más personal a posibles contagios. Tras eso se retiran los EPP y se duchan para luego seguir con la jornada laboral.

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