Judiciales > Libertad condicional
Motochorros atropellados, condenados a casi dos años de cárcel
Los motochorros habían asaltado a una joven de Villa América, en Capital. En la fuga fueron arrollados por una camioneta y la Policía de San Juan los atrapó.
Por Germán González
El Sistema Especial de Flagrancia condenó este viernes a los motochorros que fueron arrollados por una camioneta el miércoles en Capital, a cumplir la pena de un año y 10 de prisión en suspenso. Esto significa que no irán al Servicio Penitenciario Provincial, pero no podrán cometer otro delito, porque implicará que sean enviados directamente al penal de Chimbas. Los fiscales que se encargaron del caso fueron Cristian Catalano y David Peña.
Daniel Algañaraz y Nahuel Castillo son los protagonistas de este robo frustrado de casualidad por un siniestro vial. Este viernes, ante un juez de Flagrancia y representados por defensores decidieron abreviar para evitar ir a juicio y recuperar la libertad. Ambos estuvieron detenidos en los calabozos de la Comisaría 2da, pero el que permaneció menos tiempo ahí fue Castillo que antes fue derivado al servicio de urgencias del Hospital Doctor Guillermo Rawson por una fractura de tobillo como consecuencia del impacto que recibieron de una camioneta Oroch, en Avenida Rawson y calle Cereceto.
El juez que condenó a Algañaraz y Castillo también impuso una orden de alejamiento de la víctima, una adolescente de 15 años, y prohibición de cualquier tipo de contacto.
El hecho
La tarde del miércoles pasado, cerca de las 18.15, Algañaraz abordó sorpresivamente a la chica de 15 años, que estaba en la puerta de su casa, para sustraerle un celular Motorola. Hubo forcejeos y golpes por parte del delincuente que después subió a una moto Yamaha 150cc conducida por Castillo. Los motochorros salieron airosos por calle Cereceto hasta que se encontraron con una camioneta en avenida Rawson.
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Castillo salió corriendo del lugar después de ser atropellados por la Oroch, pero fue atrapado por la Policía a 100 metros, puntualmente en calle Uruguay 807. Algañaraz no pudo levantarse del piso a raíz de la fractura que tenía. Los ladrones quedaron al descubierto cuando la chica, acompañada por un familiar mayor de edad, reconoció a sus agresores y desbloqueó el celular que los ladrones llevaban consigo.