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El exrepresor Jorge Olivera se contagió de coronavirus
El militar que cometió delitos de lesa humanidad en San Juan está aislado de una cárcel de Buenos Aires.
POR REDACCIÓN
El exrepresor Jorge Antonio Olivera, quien fuera condenado en San Juan a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad, se contagió de coronavirus en la cárcel bonaerense en la que se encuentra cumpliendo una de sus numerosas penas.
El dato fue confirmado por las autoridades penitenciarias de la provincia de Buenos Aires, quienes aseguraron que el hombre se encuentra aislado.
El médico de guardia de la Unidad 31 del Servicio Penitenciario Federal, Ezequiel Ehmke, informó que el pasado 23 de julio se hizo el hisopado a 10 internos alojados en el pabellón VI del sector ARAM, en el cual Olivera se encontraba.
Las autoridades determinaron la necesidad de hacer el estudio después de que confirmaron que Olivera y otros internos estuvieron en contacto estrecho con un preso que dio positivo para Covid-19 y ya presentó síntomas.
Por eso desde el 19 de julio se dispuso que Olivera junto a los otros 9 internos realizarán un aislamiento preventivo total por 14 días para evitar contacto con el resto de la población.
Finalmente, el estudio determinó que Olivera sí está contagiado. En el mismo procedimiento fue hisopado Gustavo De Marchi, otro de los represores condenado en San Juan, quien dio negativo. Esto quiere decir que no se habría contagiado.
Los que dieron positivo fueron trasladados a la Unidad 21 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires mientras que los restantes 5 permanecen en el pabellón VI.
El informe Covid-19 fue remitido al Tribunal Oral de Mendoza y al Tribunal Oral de San Juan donde está el listado de los contagiados, incluido Olivera ya que actualmente está imputado y siendo juzgado en un megajuicio.
Causante del horror
El 7 de noviembre de 2011 fue un día histórico en la historia judicial de la provincia de San Juan: comenzó el juicio contra Jorge Antonio Olivera y su cómplice Gustavo Ramón De Marchi. El proceso judicial duró más de un año y medio en el que declararon 150 testigos.
Finalmente, el 4 de julio de 2013 el Tribunal Federal de San Juan condenó a Olivera por unos 50 delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar. Entre los delitos se cuentan torturas, asesinatos y asociación ilícita. Entre las víctimas está la recordada modelo francesa Marie-Anne Erize.
Si bien la condena significó un paso importante, sólo 20 días después Olivera se fugó del Hospital Militar en Buenos Aires. Estuvo 3 años prófugo y el 30 de enero de 2017 lo detuvieron tras una serie de escuchas telefónicas.