Policiales > Playa de Cuatro Esquinas
La Serena: playa prohibida y sin salvavidas, el escenario de la desaparición del joven sanjuanino
Una playa de bandera roja permanente, sin servicio de salvavidas y con fuertes corrientes es el escenario de la intensa búsqueda del joven argentino arrastrado por el mar.
POR REDACCIÓN
La playa Cuatro Esquinas, escenario de la desaparición del joven sanjuanino de 17 años, es conocida por las autoridades locales como un sitio de riesgo permanente que mantiene durante todo el año la bandera roja que indica prohibición de baño. Este balneario de la ciudad de La Serena, pese a su aparente calma, esconde corrientes peligrosas que este miércoles terminaron en tragedia.
El Capitán de Puerto Daniel Sarzosa explicó que "en nuestro país, el plan de protección para playas y balnearios comienza el 15 de diciembre", lo que significa que al momento del incidente "no se encontraba salvavida en el lugar". Esta circunstancia, sumada a que "siempre se mantiene en esta condición de bandera roja", creó las condiciones perfectas para la desgracia.
La zona donde se desarrolla la búsqueda abarca un extenso perímetro costero de notable peligrosidad. "Nos encontramos desplegando gente desde Playa Blanca, que es aproximadamente 2 km más al norte, hasta la caleta de Peñuelas que queda específicamente 3 km", detalló el Capitán Sarzosa. Los medios navales trabajan en un radio de aproximadamente una milla náutica, área que la experiencia indica donde podrían encontrarse resultados en casos de este tipo.
Las condiciones meteorológicas han complicado las labores de rescate. Las autoridades confirmaron que al momento del incidente se encontraba vigente "un aviso especial de viento sur", fenómeno que no solo dificultó el rescate inicial sino que también ha obstaculizado las tareas de búsqueda. Este viento sur anormal, combinado con el oleaje característico del sector, crea corrientes de resaca que pueden arrastrar incluso a nadadores experimentados.
El operativo de búsqueda se ve obligado a trabajar en una zona donde, como reconoció el propio Capitán Sarzosa, "la gente normalmente se baña" a pesar de la señalética de advertencia. Esta contradicción entre la práctica habitual de los bañistas y el peligro latente convierte a Cuatro Esquinas en un punto crítico que requiere especial atención de las autoridades, especialmente en temporada previa al verano, cuando el flujo de turistas -incluyendo argentinos que cruzan por el paso de Aguas Negras- comienza a incrementarse.