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Judiciales > CRIMEN DE VILLA DEL SUR

La silenciosa reconstrucción de una tarde de caos, violencia y sangre

Con el respaldo de más de diez efectivos, volvieron a investigar la casa de Nahuel Sosa, imputado por homicidio agravado en el crimen de Matías Pochi Maurín.

POR REDACCIÓN

13 de octubre de 2021
El fiscal Adrián Riveros, que investiga el homicidio, participó en la inspección ocular. Foto DIARIO HUARPE.
Foto DIARIO HUARPE.
Los investigadores fueron con apoyo de las fuerzas de seguridad por el miedo a un ataque de piedras. Foto DIARIO HUARPE.
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El fiscal Adrián Riveros dirigiéndose a la casa de Nahuel Guardia Sosa. Foto DIARIO HUARPE.
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El abogado Olivera Legleu defiende a los hermanos Guardia Sosa. Foto DIARIO HUARPE.
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La quietud y el silencio reinaron en la calle de Villa del Sur donde meses atrás hubo gritos, balaceras y muerte. En inmediaciones de Luna y Benavidez, el 29 de agosto Matías Emiliano Pochi Maurín fue asesinado de un disparo en el pecho. Este miércoles, Fiscalía realizó la inspección ocular en la casa donde ocurrió el homicidio, que es la del imputado por el crimen Nahuel Guardia Sosa. El panorama era distinto, pero la tensión estaba intacta, como si no hubiese transcurrido más de 40 días desde aquel momento.

El fiscal Adrián Riveros, que investiga el homicidio, participó en la inspección ocular. Foto DIARIO HUARPE.

Los investigadores fueron con apoyo de las fuerzas de seguridad por el miedo a un ataque de piedras, como el que sufrió el personal judicial y policial el día del crimen. Pero parecía que nadie vivía en la cuadra. No hubo ataques y los vecinos no se acercaron a ver como cuando los familiares y amigos de Maurín desmantelaron la casa de Guardia Sosa minutos después del asesinato. Es una calle cerrada, así que tampoco circulaban autos.

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Foto DIARIO HUARPE.

Dejó de ser una zona fantasma cuando una señora se asomó a la vereda. Justo cuando los fiscales y abogados hacían sus análisis, pero rápidamente volvió a ingresar. En la entrada de su domicilio estaba estacionado uno de los dos patrulleros en los que fueron los nueve policías encargados de la seguridad. Más atrás estaba infantería; sus cuatro efectivos controlaban los alrededores para atajar cualquier posible altercado.

Los investigadores fueron con apoyo de las fuerzas de seguridad por el miedo a un ataque de piedras. Foto DIARIO HUARPE.

Para el fiscal del caso, Adrián Riveros, la tranquilidad y falta de inconvenientes no pasó desapercibida. Lo que no le extrañó fueron las puertas de los vecinos cerradas a la investigación: “El día del hecho no colaboró ninguno con nosotros”.

Asimismo, comentó a DIARIO HUARPE que en la inspección pudieron establecer la mecánica del asesinato. Con esta reconstrucción, Guardia Sosa está más complicado. Confirmaron que la bala que mató a Maurín fue disparada desde su techo y Riveros señaló que “en un principio él sería el culpable”.

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