Provinciales > A partir de este miércoles
Habilitaron a bares y restaurantes a atender en espacios cerrados, pero con límites
Podrán usar un máximo del 30% de superficie. Antes, estaban autorizados a poner mesas nada más que al aire libre.
Frente a la preocupación que reina en el sector gastronómico por los efectos de la pandemia del coronavirus y las restricciones oficiales, el Gobierno provincial resolvió flexibilizar más su funcionamiento. Los bares, confiterías, lomotecas y restaurantes estaban autorizados a prestar servicio únicamente al aire libre, pero desde este miércoles también podrán poner mesas y recibir clientes en el interior de los locales. La condición es que ocupen como máximo el 30% de la superficie disponible, de manera de garantizar la distancia mínima entre los comensales.
La medida surge a poco más de tres semanas después de que San Juan saliera de la cuarentena estricta que se dictó en agosto por el brote de coronavirus en Caucete. A principios de este mes, la gestión de Sergio Uñac dispuso el pase a Fase 3 y flexibilizó distintas actividades, entre ellas la de los gastronómicos.
Los locales de comidas volvieron a trabajar el 5 de septiembre, pero sólo al aire libre y con un factor de ocupación del 40%. Eso hizo que cientos de negocios no pudieran abrir o que lo hicieran parcialmente, debido a que no cuentan con espacio en la vereda o tienen una superficie abierta muy chica.
Los más afectados, entre ellos los propietarios de los más de 30 negocios que están en los patios de comida de los centros comerciales, empezaron a reclamar la semana pasada que les permitieran atender en lugares cerrados. Al mismo tiempo, advirtieron que muchos no iban a tener otra que cerrar definitivamente sus puertas si se mantenían las mismas restricciones.
Las autoridades del Ministerio de Turismo ya venían estudiando la situación y este martes, aprobación del Comité Covid-19 mediante, el Gobierno notificó a los gastronómicos de que podrán empezar a prestar servicio en el interior de los salones. La medida rige desde las 00 de este miércoles.
Claro que los dueños no tendrán vía libre. En los espacios cerrados podrán ocupar nada más que el 30% de la capacidad, con el objetivo de que las mesas estén a un mínimo de 2 metros entre sí y se cumpla con el distanciamiento social que busca evitar contagios de coronavirus. Mientras que si arman afuera, deberán seguir respetando el límite del 40% de ocupación.
Las dudas en el Gobierno pasaban, fundamentalmente, por los bares. En muchos, antes del brote de Caucete, cuando San Juan estaba en Fase 5 y los negocios podían recibir público en el interior, era común ver mesas muy juntas, jóvenes agolpados y otras violaciones al protocolo sanitario para prevenir la propagación del virus.
Las autoridades provinciales les hicieron saber a los empresarios que habrá sanciones y clausuras, como la que se le aplicó hace poco a un conocido bar ubicado en avenida Libertador, hacia el oeste de calle Urquiza. “El que no cumpla, se tendrá que hacer cargo”, aseguró Marcelo Quiroga, integrante de Comerciantes Unidos.
La ministra de Turismo, Claudia Grynszpan, apeló también a la conciencia de la gente. Tras la nueva flexibilización, aseguró que “mucho depende de la responsabilidad de cada uno, de pensar si hay que entrar o no a un lugar donde no se está cumpliendo el protocolo”.
Los locales gastronómicos mantendrán el mismo horario que traían, es decir de 7.00 a 1.00, y deberán continuar con las otras medidas anticoronavirus. Entre otras cosas, registrar a los clientes, tomar la temperatura, permitir hasta 4 personas por mesa y limpiar periódicamente el salón y los baños.