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Escuela ¿modelo? y el fracaso de la libertad absoluta

La viralización de un video antisemita puso en tela de juicio la cuestión Educación otra vez en primera plana y ocurrió en San Juan y en la Escuela ¿Modelo?

Estudiar historia ya es historia según parece.

Los sistemas cambiaron tanto, que hoy en vez de leer libros y dar lección, hay que editar videos que muestren una parte de la historia. Permítanme poner en duda el sistema, porque al menos en historia y geografía, seguro los de mi camada de los 50 años, nos acordamos algo más que los jóvenes contemporáneos, sólo por edad digo lo de jóvenes.

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En este nuevo esquema apareció el video discriminatorio contra los judíos, e inclusive contra los discapacitados y los “negros”; poniendo en escala superior a los nazis.

Si se quiere una buena parodia de la Alemania o Europa hitleriana nefasta para todos los sentidos humanos.

Muchas veces, cuando uno pretender mostrar algo para que se grave bien fuerte en el pensamiento del otro, y como una válida herramienta de comunicación, usa la ironía e inclusive invierte el rol. Hasta ahí todo bien.

Digo esto, pensado en la suposición que estos pibes de una de las escuelas “top” de nuestra provincia, hicieron el video para decir “este es el mundo que no debe ser”. Permítanme darle la derecha un ratito a los pibes, que con su inexperiencia de vida se les soslaye el atrevimiento de como plantearon el tema.

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Lo que no admito es que un profe que califique con casi un excelente (9) el trabajo realizado por los pibes no tiene sustento alguno, es más, es aberrante que pudiera estar al frente de un aula permitiendo semejante atropello a una historia tan nefasta que ningún presente ni futuro podrá borrar ni limpiar.

La reacción del Ministerio de Felipe de los Ríos fue oportuna y acertada; y espero que las sanciones sean severas para el docente y también para el establecimiento escolar por su responsabilidad institucional.

Esta escuela modelo que tiene como misión “ofrecer a sus alumnos una educación formal de elevado nivel académico, atendiendo paralelamente y en todos los niveles, a la formación de una persona íntegra, solidaria y emprendedora”; ha incumplido acabadamente su objetivo.

Esta misma escuela, a la que, con un gran sacrificio de mis amados padres yo pude ir a jardín de infantes, con grandes personas como Jorgito Carrión y Marito Parisí hijo del gran periodista Mario Héctor; hoy debe repensar muchas cuestiones que tienen que ver con la educación. El estado crítico se ha alcanzado y deben repensarse varias cuestiones.

La primera, es la falta de disculpas ante semejante atropello, salvo que se muestren como intocables por su status quo social; acto soberbio que también repudio.

No más, porque creo que mucho se ha dicho sobre el tema; pero que si es causa eficiente para que meditemos sobre algunas cuestiones.

Estas escuelas no deben ser subsidiadas por el Estado, es decir por nosotros. Si algo de dinero va a parar a estos establecimientos educativos de negocio privado, yo lo redestinaría a las escuelas enteramente públicas y sobre todos a aquellas que trabajan con los niños y jóvenes que pertenecen a los deciles de mayor vulnerabilidad social, y así podemos nivelar en forma ascendente.

En segundo lugar, la escuela debiera realizar obras comunitarias educativas y salir a explicar la verdad de esta parte de la historia y salir a pedir públicas disculpas, pero no sólo con un comunicado sino, con acciones concretas. Espero verlas.

En tercer lugar, poner sobre análisis estos sistemas de estudio que evidentemente están fracasando, porque poner en estado absoluto la libertad de pensamiento de los pibes, es evidente que tiene su fracaso.

En cuarto lugar, aunque quizás el más importante; mis sinceras disculpas a todo el Pueblo Judío, y yo me detengo en las dos personas que me enseñaron mucho de la verdad de su pensamiento y accionar como lo fueron Paulina y lo es ahora mi querido Amigo Sergio Eiben.

Sigo sin entender muchas cosas, pero si me enseñaron lo que es el amor por su pueblo, por su raíz, por su esencia, por su pasado y por su presente. Si aprendiéramos de ellos, estaríamos algo mejor seguro.

Perdón.

Hasta la próxima.

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