Departamentales > Tradición y devoción
XXII Cabalgata de Fe a la Difunta Teresa: Tradición gaucha en honor a la patrona de las embarazadas
XXII Cabalgata de Fe a la Difunta Teresa. Tradición gaucha en honor a la patrona de las embarazadas.
POR REDACCIÓN
Se viene la XXII Cabalgata de Fe a la Difunta Teresa el próximo 17 de agosto. La concentración será en el Barrio Presidente Perón a las 9hs.
TE PUEDE INTERESAR
A mitad se espera una parada técnica para el almuerzo a la alforja en el Paraje Guayaupa. La cabalgata terminará con el tradicional fogón. Además de la celebración religiosa junto a espectáculos artísticos.
La Cabalgata a la Difunta Teresa, es un evento que reúne a los gauchos y jinetes de distintas agrupaciones, además de devotos a la Difunta, patrona de las embarazadas.
Sobre el paraje
La leyenda de la Difunta Teresa tiene sus raíces a finales del siglo XIX, cuando Teresa Merlo de Vargas vivía junto a su esposo al norte de los Baños de Guayaupa, en el departamento de Angaco. En este entorno árido, rodeado de algarrobos, jarillas y jumes, su hogar se encontraba en un paso obligado para viajeros y trabajadores de minas cercanas. Todos los días, Teresa salía a ofrecer agua a los que pasaban por ese desolado lugar, cargando leña y carbón en su camino hacia Jáchal o Valle Fértil, y con el tiempo, se ganó la reputación de ser una mujer bondadosa y servicial.
TE PUEDE INTERESAR
La vida de Teresa cambió trágicamente cuando, estando en un avanzado estado de gestación, sufrió un accidente mientras buscaba alimentos. La caída le provocó una grave hemorragia que terminó con la vida de su bebé antes de que su esposo pudiera encontrarla. En sus últimos momentos, Teresa pidió ser enterrada en la tierra que tanto amaba, pero su marido decidió llevarla al cementerio de Angaco. Según la leyenda, fuerzas sobrenaturales impidieron el traslado de su cuerpo, obligando a su familia a enterrarla en el lugar donde había vivido toda su vida.
Con el tiempo, el lugar de descanso de Teresa se convirtió en un sitio de devoción. Aunque su cuerpo fue trasladado años después a otro sepulcro, la construcción de una capilla en su honor atrajo a numerosos devotos que comenzaron una tradición de peregrinación anual. La Difunta Teresa, que murió sin asistencia médica, es hoy en día venerada especialmente por mujeres embarazadas que le piden por partos sin complicaciones, así como por aquellos que buscan trabajo o protección en sus viajes.