Provinciales > En San Miguel del Monte
Fue con sus 2 hijas a despedir a una familiar asesinada y quedaron varadas en Buenos Aires
Por Emilia Junco
Paola Lara tiene 41 años, es sanjuanina y hace 2 meses que está en San Miguel del Monte (Buenos Aires) y quiere volver a su casa de Rawson. La acompañan 2 de sus hijas, Evelyn de 15 y Cintia de 26, que tiene una discapacidad física y mental.
"Viajé a Buenos Aires el 7 de marzo porque falleció mi sobrina, Micaela Rivera. A ella la mató su pareja en el Chaco y trasladaron su cuerpo hasta acá. Vinimos a su velorio y a acompañar a la familia", le contó Paola a DIARIO HUARPE.
Pese a tener pasajes de vuelta a la provincia, no pudieron regresar debido a la cancelación por la cuarentena que comenzó a regir el 20 de marzo.
"Cuando ya se rumoreaba lo de la cuarentena decidí volver. Llamé a la empresa Autotransporte San Juan donde había comprado los boletos ida y vuelta abiertos. Me informaron que estaban viajando normal, con 2 salidas diarias", relató Paola.
Según contó, junto a sus hijas viajaron 200 kilómetros para llegar a Retiro y tomar el colectivo que las traería a San Juan, pero al llegar a la Terminal desde la empresa le dijeron que habían decidido sacar 1 de los 2 colectivos que iban hasta Cuyo.
"Me dijeron que estaban reubicando a la gente pero que tenían todo cubierto por 3 o 4 días. Le tuve que pedir a mi familia de Buenos Aires que por favor nos buscaran, porque ya no tenía mas plata", explicó la mujer. Fue en esas fechas cuando se decretó la cuarentena y nadie pudo viajar de un extremo a otro de Argentina.
Según Paola la empresa Autotransporte San Juan no atendió ningún reclamo, ni vía telefónica ni mail.
"Entendemos la situación del aislamiento pero queremos volver a San Juan. La Municipalidad de San Miguel del Monte nos ofreció permisos para circular hasta allá pero la movilidad la tenía que buscar yo y no tengo recursos para hacerlo. Un remis me cobra $28.000. ¿De dónde los saco?", lamentó.
La mujer explicó que la preocupación cada día es mayor. Es que el frío y la lluvia se hacen sentir y ninguna se llevó abrigo suficiente para soportarlo.
"Tengo mucho miedo de que se enfermen. Mi hija Cintia ya quiere volver, llora mucho porque quiere ver a su papá. Queremos irnos de acá y necesitamos ayuda para hacerlo", concluyó Paola.