Judiciales > Ocurrió en San Martín
Cuál será el futuro de la causa por la muerte de la nena sanjuanina que cayó a un pozo
POR REDACCIÓN
Una tragedia enlutó a una familia del departamento San Martín. Durante la tarde del sábado una nena de 11 años murió tras hundirse en un pozo ladrillero, de acuerdo a lo que relataron fuentes policiales. Todo ocurrió en Avenida Sarmiento a 60 metros pasando calle San Isidro. La pequeña cayó a un barranco y la tapó la tierra quedando casi completamente sepultada: solamente se le veía sus pies y parte de la espalda.
La Unidad Fiscal Delitos Especiales actuó en el lugar y recabó datos clave. Sin embargo, la causa judicial se encamina al cierre definitivo porque fue considerado como un hecho accidental. La muerte de esta nena no implicó extender la responsabilidad ni por autoría del caso, ni tampoco por negligencia o irresponsabilidad por parte de un adulto mayor.
Desde la Justicia explicaron que la familia forma parte de la comunidad boliviana. Hace varios años están asentados en ese lugar y se dedican a la fabricación de ladrillos para la construcción. La nena había estado junto a su padre y sus dos hermanas, de 15 y 8 años. El hombre les dijo que se fueran a comer a lo de su tía, debido a que la madre de las pequeñas está en Bolivia cuidando a su hermana enferma.
La fallecida les prometió a sus hermanas que se quedaría jugando, mientras las otras niñas regresaron a la casa de su tía. A los minutos arribó el padre y preguntó por la pequeña. El asombro se apoderó de todos porque pensaban que era supervisada en el patio. Fueron a buscarla y la muerte ya se había apoderado de su cuerpo.
Los familiares encontraron un montículo de tierra nuevo, es decir, un derrumbe que no estaba antes. De repente encontraron los pies de la pequeña y la desenterraron. La intentaron reanimar, pero ya era tarde. Esto mismo fue lo que declararon ante el fiscal de la causa, Renato Roca.
Los peritos la trasladaron hasta la Morgue Judicial en donde le practicaron la autopsia. El informe forense determinó que fue accidental: no había signos de violencia. La causa del deceso fue asfixia por sofocación. La criatura quedó sepultada entre barro y bancos de tierra. Aspiró polvo, ya que tenía material terroso en las vías aéreas.