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Ladrones se llevaron hasta las puertas de la heladera en el barrio Ferroviario
Los propietarios dicen que denunciaron al menos 15 robos, pero no encuentran respuesta de la Policía.
Por Ariel Patruceli
Un nuevo robo en una vivienda ubicada en la zona norte del barrio Ferroviario terminó por dejar completamente vacía la casa que hace un tiempo fue dejada por su dueña, una mujer de 94 años, quien se fue a vivir con un hijo para estar bajo su cuidado.
La casa había quedado completamente equipada y con medidas de seguridad que los ladrones no respetaron y destruyeron para robar en reiteradas ocasiones.
La casa hoy está convertida en ruinas a pesar de que en este último robo ocurrido hace dos días tres ladrones fueron sorprendidos por uno de los hijos de la dueña, quien dio aviso a la Policía y uno fue atrapado.
Para desazón de la familia, el sujeto que fue encontrado adentro del inmueble trató de huir por el techo, pero cayó detenido. Pero fue liberado a las pocas horas por no haberle encontrado elemento alguno que estuviera robando y sólo se le inició un expediente contravencional, según explicaron en la Comisaría 4° que intervino en el caso.
La familia España se mostró desprotegida y molesta por lo ocurrido, ya que por primera vez en la innumerable cantidad de robos pudieron atrapar a quien podría ser uno de los autores de los constantes saqueos, al punto de perder todo lo que había adentro y fuera de la casa.
Los damnificados apuntaron a la Comisaría 4° de Desamparados que tiene jurisdicción en el barrio Ferroviario por no haber iniciado una investigación para tratar de ubicar algunos de los objetos que robaron en el inmueble. Nunca pudieron recuperar nada y probablemente este detenido podría poseer parte de esos efectos.
La casa no tiene puertas, ventanas, mobiliario, elementos de calefacción y de frío porque todo fue robado, dijo uno de los hijos de la anciana propietaria a quien no quieren siquiera llevar a ver su vivienda por el estado en que la dejaron los ladrones.
Lo último que robaron fue el calefón y destruyeron el aire acondicionado que no pudieron llevarse. La cocina fue sustraída por el techo de la casa. Las puertas de una heladera fueron sustraídas sólo para extraer los elementos de aluminio como bisagras y picaportes. El portón de la casa también fue robado y ningún vecino vio ni escuchó nada cuando fueron consultados por los propietarios acerca de quién o quiénes se lo llevaron.
La propiedad está a merced de los delincuentes, indicó la familia damnificada y apuntó a la comisaría jurisdiccional por no haber investigado tras haber recibido el número récord de denuncias que la familia radicó en Comisaría 4°, desde donde tampoco recibieron o fueron interrogados por los efectivos o jefes para encarar juntos una investigación.