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Judiciales > Caso Galván y Cassab

Mandan al penal a la mujer acusada de prostituir a su sobrina

El juez Matías Parrón decidió que la tía continúe con la prisión preventiva en el Servicio Penitenciario Provincial y no con arresto domiciliario como había pedido su abogado.

POR REDACCIÓN

14 de abril de 2021

NOTA DEL EDITOR

Importante

Si conocés un hecho de abuso sexual contra menores o personas con discapacidad debés acercarte por Avenida Córdoba 452 (este) al centro Anivi– Capital o llamar a los teléfonos: 427-5314 / 5493.

Nuevamente le negaron la prisión domiciliaria a la mujer de 33 años acusada de prostituir a su sobrina y de tratar de convencer a otra menor, amiga de la víctima, a que vaya por el mismo camino. Además la enviaron al Servicio Penitenciario Provincial, para que cumpla allá la prisión preventiva hasta que se cierre la investigación de la causa en su contra y se celebre un hipotético juicio. Para esto resta al menos seis meses. La tía es sospechosa al igual que el dirigente social Roberto “Fido” Galván y el empresario Carlos Hugo Cassab, imputados por el delito de promoción de la prostitución de una menor. El empresario caucetero si consiguió el beneficio de arresto domiciliario y ahora está en una finca de Ullum.

Este miércoles, cerca de las 14.30 hubo una nueva audiencia, pedida esta vez por el abogado de la mujer, Leonardo Villalba. El letrado solicitó la misma para que declare un psiquiatra de parte y testifique que su defendida necesita estar en lugar donde pueda llevar a cabo su tratamiento con pastillas, ya que es una paciente psiquiátrica por haber tenido en su pasado problemas con la droga. 

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Sin embargo, el juez Matías Parrón no dio lugar al beneficio y estableció que la acusada pase de la Comisaría 28ª, donde estaba alojada, al Penal de Chimbas. Esto fue lo solicitado por la fiscal de UFI Anivi que investiga el caso, Valentina Buacciarelli. Ahora falta saber el destino de Roberto "Fido" Galván, pero todo indica que tendrá la misma suerte que la mujer, ya que están acusados de delitos graves. El que sí arribó a buen puerto con su pedido fue Carlos Hugo Cassab. La semana pasada el mismo juez Parrón le otorgó la domiciliaria, pero con custodia policial porque todavía no estaba la tobillera electrónica a disposición. 

Galván y Cassab están en la mira de la Justicia por pagar para tener sexo con la menor. Pesa en sus espaldas el delito promoción de la prostitución. Primero se los acusó de estupro, pero la Fiscalía cambió la calificación después de escuchar el testimonio de la adolescente de 14 años. El día de la entrevista videograbada (exCámara Gesell) en el centro Anivi, surgió una nueva víctima: la amiga de la chica, de 15 años, que se presentó a declarar como testigo. 

La tía de la víctima está más complicada que los hombres. A ella se le achaca promoción y facilitación de la prostitución de una menor en dos hechos y explotación económica de la prostitución, agravado en uno de los hechos por el vínculo. Todos los imputados, en caso de ser encontrados culpables y sentenciados por un juez, podrían cumplir una pena de prisión efectiva. La mujer de 33 años corre el riesgo de recibir la condena más alta, hasta 45 años de cárcel. 

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