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Hinchas de Desamparados le llevaron donaciones a la familia de Lara
La familia de la nena asesinada por el pitbull recibió a integrantes de la Agrupación Verde y Blanca.
Por Pablo Karki
Lara Rebeca Agüero era la menor de siete hermanos. Murió durante la mañana del lunes 14 de septiembre después de sufrir un feroz ataque de un perro pitbull. La tragedia ocurrió en la manzana G del barrio Malimán, en Rawson.
La pequeña salió de su casa aquella mañana a comprar en un comercio cercano. Iba junto a su hermana de 10 años y un primo también menor.
Los niños se dieron cuenta de que el perro del verdulero se había soltado y venía hacia ellos. El nene que iba con Lara alcanzó a huir, pero la pequeña no tuvo oportunidad de salir corriendo e intentó resguardarse tras una medianera. El perro la encontró allí y la atacó.
De acuerdo al informe policial, aquel día el pitbull le mordió el cuello y le destrozó la aorta. Esto desató una gran hemorragia y la niña quedó tendida en el piso en medio de un gran charco de sangre.
La familia de Lara quedó destrozada. Hizo marchas pidiendo justicia por la nena de 9 años, pero saben que nadie se las devolverá, sólo piden una condena contra los dueños del perro.
El fin de semana pasado, tanto Barbarita Cepeda y Fabián Agüero, los padres de la niña, como sus hermanos, recibieron una visita inesperada. Es que la Agrupación Verde y Blanca, integrada por hinchas de Sportivo Desamparados, visitó a la familia con una buena cantidad de mercadería, ropa y zapatillas, a lo que la familia quedó inmensamente agradecida porque en esta época de pandemia no tienen trabajo y se les hace muy difícil poder subsistir a la mala situación económica.
Sólo Cristian Sánchez y su hija Florencia asistieron a visitar a la familia de Lara debido a que no podían ir más por la pandemia. Ambos quedaron shockeados por como vieron a la familia con el ánimo por el piso por la trágica muerte de su hija.
Barbarita les dijo con lágrimas en los ojos a Cristian y a Florencia: "Mi hija era hermosa, buena, solidaria y valiente. Ella nació con labio leporino y cuando se iba a operar, me decía que me quedara tranquila, que ella iba a volver. Ahora la perdí para siempre. Sólo deseo que alguien pague con cárcel por lo que pasó con mi hija".