Publicidad

Provinciales > Más control

El 911 buscará acceder a los datos de bromistas sanjuaninos para multarlos

En el organismo reconocen que hubo una disminución de llamados graciosos, aunque quieren contrarrestar esta práctica definitivamente.

08 de marzo de 2021

En tiempos donde la urgencia y la emergencia fueron las protagonistas en San Juan por las contingencias de la naturaleza, algunos sanjuaninos siguieron utilizando el 911 para hacer bromas. Si bien en el Cisem dijeron que durante la primera parte de este año hubo una marcada disminución, quieren erradicar esta práctica de raíz. Por este motivo, desde el organismo trabajan para acceder a los datos de los bromistas para posteriormente multarlos.  

“Ha disminuido bastante los llamados graciosos, pero estamos trabajando para que se aplique la contravención correspondiente”, dijo a DIARIO HUARPE Guillermo Reynoso, subdirector del 911. 

El funcionario reconoció que del total de las comunicaciones mensuales que tienen – cerca de 70.000 – el 15% lo constituye las llamadas en broma. Sin embargo, años anteriores ese segmento de la nómina llegó a significar casi el 30% de los que ingresaban, es decir, que 3 de cada 10 advertencias al 911 eran graciosas o sin sentido.

Publicidad

En busca de aplicar una multa, Reynoso señaló que todos los centros del 911 en el país están trabajando con la nueva reglamentación de la ley de telecomunicaciones. Con esta reforma será factible que el organismo pueda acceder a los datos para infraccionar, entre otras cosas, a los bromistas.

El subdirector precisó que en la práctica muchos países tienen acceso a esa información, pero en Argentina está en trámite. Para ponerle luz a la cuestión, el funcionario indicó que en estos días tendrán una reunión con el Ministerio de Seguridad a nivel nacional para ver la regulación y el avance de la normativa.

“A los llamados en broma le damos un seguimiento y en algunos casos, cuando tenemos identificado el número, generamos una contravención para el dueño de la línea”, contó. Esto si bien podría ser el esquema lógico, en la realidad se disipa porque la mayoría de las alertas provienen de teléfonos públicos o figuran como número desconocido, de acuerdo a lo que explicaron.

Otro de los puntos a tener en cuenta es que no tan solo se podrá averiguar y hacer el seguimiento de las llamadas en broma, sino también de las caídas o pérdidas, es decir, aquellas que llegan al operador, pero que una vez que son atendidas del otro lado de la línea cortan. Actualmente esta franja representa el 30%. En el Cisem aducen, de manera preliminar, que  puede ser por la inaccesibilidad a la red o porque provienen de lugares alejados.

Publicidad

Para corroborar esos llamados y ver si la persona está atravesando una emergencia, desde el 911 vuelven a llamar. Reynoso contó que algunas veces se pueden contactar con la persona y otras no. En el primer caso muchas aducen que se equivocaron al marcar, mientras que en el segundo supuesto utilizan la geolocalización para acudir hasta el domicilio del emisor y comprobar si necesita asistencia.

Reynoso dijo que el operador debe volver a insistir con el llamado. Si en el segundo intento no hay respuesta se envía algún control para chequear la situación. El subdirector también indicó que en el organismo hay una planilla que registra las veces que un determinado usuario se comunicó con el 911. Estos datos se acoplan a un seguimiento mensual y, en casos ciertos, una persona puede recurrir a otros sectores del Cisem como puede ser la referida a la contención emocional o psicológica.

Contingencias naturales: terremoto y lluvias

Con un poco menos de llamados, el 911 fue uno de los canales de emergencia elegido por algunas familias sanjuaninas para solicitar ayuda durante las últimas lluvias que se registraron en la provincia. En apenas dos días recibieron 336 advertencias de situaciones diversas: derrumbes, colapsos de viviendas, emergencia alimentaria, entre otras. Sin embargo, en el terremoto del 18 de enero ese número se cuadriplicó y alcanzó las 1.378 llamadas ingresadas durante esa madrugada.

“Nosotros derivábamos y dividíamos las llamadas por municipio. Cada una de ellas iba destinada al área de acción social. Esto se hizo para que tuvieran una información más precisa de lo que estaba sucediendo”, contó Reynoso.

Cuando la llamada era grave, es decir, corría riesgo de que una pared o el techo de la vivienda se derrumbaran ese aviso pasaba a Bomberos y Protección Civil.

DATO

El Cisem recibe entre 1.800 a 2.200 llamados por día. Esto totaliza 70.000 pedidos de auxilio mensuales.

Publicidad
Más Leídas
Publicidad