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Milei viaja a la Antártida con agenda global de lucha contra el microplástico
El presidente, Javier Milei, partirá esta tarde a Santa Cruz, pasará la noche en Río Gallegos y el sábado a primera hora se trasladará a la Base Marambio en la Antártida para iniciar un programa contra la contaminación de microplásticos.
POR REDACCIÓN
Este viernes, a las 18 horas, el presidente Javier Milei inicia el periplo a la Antártida buscando iniciar un programa de control de contaminación de microplásticos. El mandatario viajará en un Boeing 737 de la Fuerza Aérea, acompañado por su hermana, la canciller Diana Mondino, y otros funcionarios.
El viaje de Milei se gestó a propósito de la visita de Grossi, titular del organismo internacional nuclear que lleva adelante un programa de control de contaminación de océanos por microplásticos, propiciado por Naciones Unidas. Otra aeronave transportará carga y equipamiento destinado a laboratorios y en particular aquellos que los científicos de OIEA usarán en la iniciativa de control ambiental Nutec Plastics.
El vuelo al continente blanco hará escala en la base aérea de Río Gallegos, la comitiva pernoctará en esa instalación militar y reiniciará la travesía al día siguiente. Abordarán un Hércules C-130 en horas de la mañana que finalmente los trasladará hasta la base Marambio.
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La meteorología es el factor determinante, hay una ventana entre las 7 y las 15 horas para poder completar con éxito la misión de llevar al presidente y sus acompañantes hasta el confín del territorio antártico. Un cambio repentino de las condiciones climáticas, bastante habitual en Marambio, puede dejar a la comitiva en suelo santacruceño.
La repentina decisión presidencial de pisar suelo antártico más que un gesto de afirmación y compromiso soberano surgió de la convergencia de intereses diplomáticos entre Mondino y Grossi en una agenda global de cierta vanguardia: la amenaza de la contaminación por microplásticos que afecta a las partes más remotas del mundo, como la Antártida.
Los primeros indicios de la presencia de contaminantes plásticos se dieron en sedimentos de aguas profundas En el océano antártico (2013). Más reciente, hubo alarma porque los cuerpos poliméricos diminutos de menos de 5 mm aparecieron en cursos de agua de deshielo de nieve próxima a varias bases entre ellas Scott (Nueva Zelanda) y McMurdo (EE.UU.).