Cargos para las minorías: un funcionario continúa y tres serán reemplazados

El próximo mandato no sólo abre expectativas en los peronistas por los cargos en juego. En las dos primeras minorías parlamentarias también, por los lugares que tienen reservados en el Tribunal de Cuentas y el Instituto Provincial de Exploraciones y Explotaciones Mineras (IPEEM). En el seno del bloquismo, en medio de una fuerte interna, es un hecho que no les darán continuidad a los funcionarios que se desempeñan actualmente en esos organismos y ya hay en danza una serie de nombres para reemplazarlos. Producción y Trabajo le renovará la confianza a su aliado Enrique Conti en la tarea de controlar las cuentas públicas y a Ricardo Gutiérrez le busca sucesor en la repartición minera porque asumirá como concejal en un municipio.

El Tribunal de Cuentas y el IPEEM son dos organismos vitales en el funcionamiento del Estado y la Constitución les da participación en ellos a los partidos que en las elecciones provinciales resulten primera y segunda minoría legislativa. El primero se dedica a controlar que la inversión de los recursos públicos sea legal y el segundo administra las áreas mineras de la provincia y las entrega en concesión a eventuales inversores.

Desde hace más de una década, los cargos de las minorías siempre fueron para las mismas fuerzas. Producción y Trabajo viene siendo la más votada de la oposición y el bloquismo hace un juego cuestionado por muchos: desde 2007 es aliado del PJ en las listas de candidatos y después de cada comicio, manda a sus diputados a armar bloque propio para quedar como la segunda minoría.

A partir del mandato que se inicia el 10 de diciembre, Producción y Trabajo cambiará parcialmente. Gutiérrez no seguirá en el IPEEM porque se sentará en la banca de edil que ganó en junio en Capital y por ahora no se conoce el nombre del sucesor. Lo contrario sucederá con el histórico bloquista Enrique Conti, que continuará en el Tribunal de Cuentas. 

Conti es uno de los bloquistas disidentes que en 2007 decidió pegar el portazo en su partido por no estar de acuerdo con la sociedad con el PJ. Se sumó al frente que lidera Producción y Trabajo, hace 4 años fue designado en el organismo de control y, según dijo ayer Marcelo Orrego, el nuevo líder del espacio, "viene trabajando muy bien y va a seguir". 

En el bloquismo orgánico, la situación es distinta. Sin un líder con la misma fuerza y consenso que en el caso anterior, la interna está que arde. Lo mismo, afirman en la sede de calle Mitre, la suerte está echada.

La presidenta del partido, Graciela Caselles, que el año que viene termina mandato, quería sostener a Laura Yanzón en el Tribunal de Cuentas y a Alejandro Genest en el IPEEM. La primera es de su extrema confianza y lleva 12 años en ese lugar, mientras que el abogado está por cumplir 4 en funciones.

A Caselles se le pararon enfrente dos de los tres diputados que conformarán el bloque bloquista y que tendrán la responsabilidad de nombrar a los funcionarios en cuestión: Andrés Chanampa y Edgardo Sancassani. La critican duramente por reservar cargos para su gente de confianza solamente y están decididos a que ni Yanzón ni Genest continúen, en tanto que Mauro Marinero responde a la presidenta pero acompañaría a sus compañeros.

A algo más de tres semanas para el 10 de diciembre, hay varios nombres en danza para ir por Yanzón y Genest. Según fuentes partidarias, para ir al Tribunal de Cuentas están en consideración los contadores María Inés Coll, Darío Maratta y Marcelo Plana y para el IPEEM suenan Alejandro Bravo (hijo menor del caudillo bloquista), Federico Rizo y Carlos Rueda.

Sumo interés

Los cargos en juego dan una importante cuota de poder y tienen un buen sueldo, sobre todo el del Tribunal de Cuentas. Un miembro de ese organismo percibe un haber bruto de $320 mil, mientras que un integrante del IPEEM gana cerca de $125 mil en el mismo concepto.