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Josemaría: líderes religiosos conocieron la mina y a sus trabajadores
En la previa de Navidad, integrantes de la Mesa Interreligiosa subieron a la mina de cobre por primera vez a acompañar espiritualmente a los trabajadores.
POR REDACCIÓN
A más de 4.000 metros sobre el nivel del mar y lejos de la familia, la espiritualidad es fundamental. Ese es el mensaje que dejaron los integrantes de la Mesa Interreligiosa de San Juan, donde representantes de distintas religiones y cultos trabajan juntos, luego de visitar el Campamento Batidero de Josemaría
Todo empezó como una previa de las celebraciones de Navidad y se concretó este 12 de diciembre. Desde la empresa invitaron a los líderes religiosos a conocer la mina y les dieron la posibilidad de hacer una ceremonia especial para aquellos trabajadores que quisieran participar. Unos 40 se sumaron en la bendición y misa que hicieron padre Roberto López, sacerdote de Rodeo; el pastor evangélico Ángel Carrizo; Carina González, comunicadora de Iglesia de los Santos de los Últimos Días; Héctor Allende, presidente de la Comisión Justicia y Paz del Arzobispado de San Juan de Cuyo.
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Ángel Carrizo habló con DIARIO HUARPE y aseguró que “fue una experiencia productiva, porque conocimos el lugar, pero sobre todo pudimos apoyar a esas personas, porque es un choque muy fuerte estar lejos de todos”. El pastor dijo que las empresas cuidan que tengan las mejores instalaciones y comida, pero que también “es importante cuidar el vínculo familiar y el más importante, que es la relación con Dios”.
Durante la recorrida conocieron sobre el proyecto. Héctor Allende habló con representantes del área de comunicaciones de la empresa y rescató que “es importante visitar el proyecto, recorrer la futura mina y cómo se ha planificado, porque eso habla de la transparencia y responsabilidad”.
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Esta visita y celebración interreligiosa es algo inédito en un campamento minero, dijo Carrizo. Fue en la previa de las celebraciones de fin de año y como un primer encuentro, pero para el pastor, es una oportunidad para seguir trabajando. “Quedamos muy comprometidos y hasta estamos dispuestos a volver periódicamente”, aseguró.
Hoy en día Batidero es un campamento en expansión, con algunos cientos de trabajadores, pero la empresa trabaja en la ingeniería convertir el proyecto en la primera mina de cobre moderna de San Juan. Para llegar al proyecto es necesario hacer más de 200 km desde Iglesia por un camino que está todavía previsto para exploración.
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Aun así, todos estos desafíos tienen otra cara, según Carrizo. “Es un lugar alejado, pero también es un lugar donde nos encontramos con la naturaleza y la obra de Dios”, aseguró.