Organizaban eventos sociales y no cumplían, dos mujeres detenidas

El caso fue descubierto el pasado 11 de noviembre, cuando una mujer que estaba a punto de casarse, decidió poner en conocimiento de las autoridades policiales, lo que había pasado con estas mujeres a las que había contratado para su fiesta y a poco de concretarse le habían dicho que no iban a poder cumplir con lo pactado.

Toda una maniobra delictiva montaron las mujeres que llevaban adelante la empresa Natalia Maradona Eventos y que en el mes de octubre le informó a esta clienta que no iba a poder cumplir con el contrato. Pese a que había recibido $180.000 de adelanto, el motivo por el cual no iba a poder hacer frente a lo pactado es porque ladrones habían entrado a su casa y le habían robado entre otros elementos, dinero y efectos personales.

Frente a esta situación, Natalia Flores Maradona (31) y su esposa Silvana Olivera (32), habrían dicho que para salvar la situación, podría el futuro matrimonio prestarles otros $40.000 y la pareja desesperada por la situación accedió a entregar ese monto que también las mujeres se dejaron.

Pese a los dichos del supuesto robo, las empresarias, nunca radicaron la denuncia y recién el pasado 11 de noviembre hicieron la presentación en la Comisaría 25ª del barrio Hualilán donde viven, aduciendo que le habían violentado la puerta de su casa y habían robado una notebook donde guardaban la información de los eventos s realizar, documentos, facturas y los contratos con sus clientes.

El mismo 11 de noviembre en la sección Estafas de la Central de Policía ingresó la denuncia del matrimonio contra las mujeres y en virtud de ello el Primer Juzgado de Instrucción del doctor Benito Ortíz ordenó la detención de las mujeres y también un allanamiento para comprobar si realmente les habían robado lo que luego denunciaron en la Comisaría 25ª, maniobra que solo habría sido para justificar que no tenían la plata de sus clientes.

Para la policía fue una sorpresa, porque en la casa secuestraron, una notebook, una Tablet, teléfonos celulares, y documentación como contratos de los clientes.

De esta manera el juez Ortíz configuró el delito de estafa en contra de estas dos mujeres. Primero fue detenida la señora Natalia Flores Maradona en la casa del barrio Hualilán, pero no hallaron a su esposa, porque hacía dos meses aproximadamente se habían separado y Olivera se había ido a la casa de sus padres.

Tras un seguimiento a Olivera la detuvieron en la vía pública caminando por el centro, en inmediaciones de avenida Rioja y San Luis.

Luego a la sección policial que inició la investigación ingresaron otras 8 denuncias de personas afectadas por las mujeres, las cuales habrían entregado según consta en las denuncias, montos de $190.000 como la primera pareja que denunció, $60.000 en otro caso, $40.000 otros damnificados y otros montos que engrosarían una suma cercana a los $350.000 que las acusadas se habrían quedado. El dinero que recibían era depositado en uan cuenta a nombre de Olivera, según la investigación policial.

El motivo por el cual se quedaron sin dinero para las personas que contrataron sus servicios es que con el dinero que le iban entregando, hacían eventos que ya tenían fecha de realización, pero al parecer gastaban más de lo que podrían seguir recibiendo y así el negocio se fue cayendo y por eso inventaron la versión del robo para tratar de salir airosas del tema. Pero todo salió mal porque las denuncias fueron hechas fuera de tiempo y lo que dijeron que les habían robado estaba en su casa.